La prensa de Hong Kong afirmó que un millonario chino desaparecido en la ciudad, investigado sobre el desplome de las bolsas chinas en 2015, fue secuestrado por agentes de seguridad de Pekín. Xiao Jianhua, uno de los hombres más ricos de China, desapareció de su apartamento en el hotel Four Seasons. Según medios en lengua china establecidos en el extranjero, fue secuestrado por agentes chinos, quienes no tienen derecho a intervenir en la región semiautónoma.

Las dudas sobre su paradero levantaron sospechas sobre otra desaparición ligada a la corrupción o las luchas políticas.

En China, los ricos empresarios necesitan el apoyo del Partido Comunista para evitar ser procesados por corrupción, detenidos o incluso secuestrados. Pero estas relaciones pueden ser de «doble filo» y están a merced de cualquier cambio político.

El país cuenta con 594 multimillonarios según la última relación de la revista especializada “Hurun”, enriquecidos gracias al desarrollo económico, pero también a sus apoyos políticos, más o menos duraderos, que les evitan, por ejemplo pagar más impuestos. Pero cuya caída en desgracia por la campaña contra la corrupción –con la que se ha sancionado a 1,2 millones de personas en cuatro años– puede acabar con el cierre de sus empresas.

Además de Xiao Jianhua, cercano a la familia del presidente, Xi Jinping, un exmagnate del sector inmobiliario, Guo Wengui, estaría exiliado en el extranjero. Varios de sus apoyos en el poder cayeron por corrupción. El multimillonario Xu Ming, próximo al ex alto dirigente derrocado Bo Xilai, murió en la cárcel a finales de 2015.