La Procuraduría General de la República de México ha admitido a trámite la denunciada presentada el pasado día 15 por Amnistía Internacional y Ligia Ceballos Franco, quien hace unos años descubrió que podría haber sido una bebé robada en 1968 durante el franquismo.

En un comunicado, el director de Amnistía Internacional en el Estado español, Esteban Beltrán, subraya que de esta forma «México se convierte en el segundo país del mundo, después de Argentina, que investigará crímenes de derecho internacional cometidos en España durante la guerra civil y el franquismo, delitos como la desaparición forzada en el que se podrían enmarcar muchos de los casos de bebés robados». La Procuraduría iniciará ahora una investigación para aclarar si el de la mexicana Ligia Ceballos se trata de un caso de desaparición forzada y para restablecer su verdadera identidad.

«Hasta ahora las investigaciones realizadas en España no han dado resultados y han descartado abordarlo como crímenes de derecho internacional, particularmente como desapariciones forzadas, al contrario de lo recomendado por diferentes organismos de la ONU».

«La justicia española ha abordado estos casos como delitos comunes, es decir, como detenciones ilegales, adopciones irregulares o falsedades documentales y como casos aislados, descartando desde un primer momento la posibilidad de que pudieran responder a una trama a nivel nacional o ser constitutivos de crímenes de derecho internacional», remarca Beltrán.

Exige al Estado español que colabore plenamente con las solicitudes de cooperación que pudieran emitir las autoridades mexicanas.