Iñaki TELLERIA
CICLISMO - GIRO 2017

¿Seguro que Fernando Gaviria es colombiano?

El sprinter del Quick Step, de 22 años, gana otra etapa más en su debut en una carrera de tres semanas.

Va a ser que sí, porque su carnet de identificación especifica que nació el 19 de agosto de 1994 –solo tiene 22 años el fenómeno– en La Ceja del Tambo, en pleno departamento de Antioquía. Vamos, cien por cien colombiano, tanto como que el café de Juan Valdéz o como Timoleón Jiménez “Timochenko”. Su apellido, aunque con “uve”, nos remite a Gabiria, en el Goierri guipuzcoano. Algún vasco se coló entre sus ancestros y quizás de ahí viene su afición por la bicicleta y, muy en particular, por la modalidad de pista, con lo que se explica su endiablada velocidad.

Con la excepción del excelente contrarrelojista Santiago Botero –Echeverri, de segundo–, en Europa estábamos acostumbrados a corredores colombianos, enjutos y pequeños, especialmente dotados para escalar. Obviamente, lo justificábamos por la orografía colombiana.

Viene a cuenta esta parrafada porque quien ayer ganó la quinta etapa del Giro, la de la despedida de Sicilia y de casa de Nibali, fue el colombiano Gaviria y no lo hizo escapado sino en un sprint con los mejores o los más en forma, y no fue la primera vez que lo hizo sino la segunda en este Giro, primera vez que corre una de las grandes vueltas.

Es lógico que nos sorprendamos porque hasta el presidente de su país, Juan Manuel Santos, tras felicitarle, reconoció que su victoria «tiene el gran valor de que fue en terreno plano. O sea que ya los colombianos ganamos en plano y en montaña».

Testigos del éxito fueron sus padres y hermana que vieron en vivo como volaba en un apretado sprint por delante del italiano Jakub Mareczko (Wilier) y el irlandés Sam Bennett (Bora), y dejando cuarto al alemán André Greipel (Lotto Soudal).

Quick Step redondeó una jornada que mantuvo un día más en el liderato a Bob Jungels, pero que había comenzado con la noticia triste de que Julian Ala- philippe, que se lesionó en la rodilla en una caída en la Euskal Herriko Itzulia, y que tuvo que ser operado ayer, no estará a tiempo para el Tour.

Por lo demás, el Giro dejó ayer Sicilia y arranca hoy su recorrido por la península con la sexta etapa, una jornada larga de 217 kilómetros entre Reggio Calabria y Terme Luigiane.

Demare gana en Dunkerque

Entretanto, el francés Arnaud Demare (FDJ) ganó la segunda de los Cuatro Días de Dunkerque, con salida y llegada en Saint Quentin, de 171’6 km, en la que el belga Jens Debusschere (Lotto Soudal) mantuvo el liderato. Hoy llega la tercera, Beauvais-Amiens, sobre 152’5 km.

Moreno pide disculpas, pero mantiene que Rosa le insultó

Javier Moreno, del Bahrain, que fue expulsado del Giro el martes tras disputarse la cuarta etapa acusado de agredir al corredor Diego Rosa (Sky), pidió disculpas en las redes sociales, pero mantuvo que el corredor italiano «me insultó primero» en la subida al Etna.

«Mis compañeros y yo estábamos llegando a la subida final. El equipo Sky se acercó por la izquierda y Rosa quería llegar hasta mis compañeros delante de mí. Cuando vió que yo resistía me insultó a lo que reaccioné empujándole y, por desgracia, le hice caer», relató.GARA