El máximo galardón que otorga el Ayuntamiento de Donostia, el Tambor de Oro, lo recibirá el próximo 20 de enero, día de San Sebastián, Richard Oribe, el nadador afectado de parálisis cerebral con mejor palmarés del mundo. El deportista ha participado en seis Juegos Paralímpicos (Barcelona 92, Atlanta 96, Sydney 2000, Atenas 2004, Beijing 2008 y Londres 2012), consiguiendo 16 medallas en las paralimpiadas: 8 oros, 6 platas y 2 bronces.

Pero ahí no queda la cosa: ha participado en cinco campeonatos del mundo obteniendo 22 medallas, 12 oros, 7 platas y 3 bronces. Ha batido en 48 ocasiones diferentes récords del mundo en 50, 100, 200 y 400 metros estilo libre. En el ámbito internacional suma 135 medallas y en los siete campeonatos de Europa en los que ha participado el nadador sus logros suman 28 medallas: 22 oros y 6 platas.

Oribe ha cosechado otras distinciones, como la medalla al mérito Ciudadano de Donostia (2007) y la medalla de oro al mérito deportivo, en 2011 en Lausanne, Suiza, el premio a la trayectoria del «juego limpio» y ese mismo año el premio al deportista vasco por la fundación Ramón Rubial, además de otros reconocimientos por parte de instituciones y prensa como mejor deportista vasco y guipuzcoano.

Se puede decir que con el Tambor de Oro 2018 Richard Oribe se quita una espina. Muy querido en la ciudad, ha sido candidato en numerosas ocasiones, y propuesto por los donostiarras, pero nunca ha llegado a ser el elegido. Una persona muy allegada al deportista aseguraba nada más confirmaba ayer el alcalde, Eneko Goia, la decisión, que el premio suponía «la mayor alegría de su vida pese a todas las medallas que tiene».

Goia destacó del nadador paralímpico que es «un luchador» y «demuestra muy bien ese valor, la capacidad de lucha de esta ciudad». Además, subrayó el valor de «la inclusión».

Cambio en el procedimiento

Este último Tambor de Oro ha sido el primero que se ha elegido por votación popular. Si algo positivo trajo el lamentable episodio del pasado año es el cambio en el procedimiento para elegir a la persona distinguida.

Recapitulemos: el pasado año, en el seno del consejo de San Sebastián Turismo, salió adelante la candidatura de la periodista Ángels Barceló. La comisión tiene doce representantes: cinco del sector privado, entre ellos la hostelería, y el resto de formaciones políticas (PNV 2, PSE 2, EH Bildu 1, PP 1 e Irabazi 1). Solo el PSE respaldó la propuesta de la catalana que, sumados a los cinco votos del sector privado, salió adelante. El resto, apoyó la propuesta de Irabazi en favor de la bailarina donostiarra Alicia Amatriain.

El estupor continuó en el pleno extraordinario del día después. Con el nombramiento como trending topic en Twitter, Ernesto Gasco anunciaba, para sorpresa del propio alcalde, que había recibido la llamada de Barceló declinando el galardón en caso de no recabar el suficiente consenso. El PSE ni si quiera participó en la votación, y el resto de formaciones se abstuvieron. Finalmente, el Tambor de Oro quedó desierto y a los días se prometió hacer un cambio en el procedimiento.

Oribe se ha impuesto a otras cuatro grandes candidatas, todas mujeres: la piragüista Maialen Chourraut, la bailarina Alicia Amatriain, la escritora Dolores Redondo y la artista Esther Ferrer, seleccionadas con rigor de entre las decenas de propuestas ciudadanas. Tras una semana de votación, tanto online como presencial, se han contabilizado 6.153 votos a favor de una persona que «representa muy bien muchos de los valores que esta ciudad tiene, el de saber superar la adversidad y saber seguir hacia adelante», ensalzaron en el acto.