El Gabinete Urkullu opta por entrar en el capital de una empresa que cotiza en bolsa como es Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) después de que en los últimos meses se haya cuestionado el papel jugado en firmas en crisis como Xey o CEL, por citar dos casos en los que la participación de Lakua era importante –del 30 y 40%, respectivamente–. Se trata, así lo resaltaron ayer en rueda de prensa los consejeros Arantxa Tapia y Pedro Azpiazu, de la primera participación en una compañía de estas características, aunque rechazaron cualquier motivación «especulativa».

En la elección de la empresa con sede social en Beasain ha primado, según apuntó Tapia, no solo su «arraigo», sino también su «carácter tractor y estratégico». «Es una oportunidad que no podíamos dejar pasar».

La operación, realizada a través de la sociedad pública Socade y financiada por el Instituto Vasco de Finanzas (IVF), ha consistido en la adquisición a Kutxabank de un paquete de 425.870 acciones de CAF por 15 millones de euros. No se descarta que esa participación del 1,24% en el fabricante de trenes pueda aumentar una vez que hasta ahora el banco poseía en torno al 14% del capital social, siendo el segundo accionista por detrás de la Cartera Social que controlan los trabajadores de la compañía con el 29,5%.

El Gobierno no entrará en el consejo de CAF pero asegura que tendrá una «interlocución directa» con el resto de socios para «todos los aspectos técnicos y de crecimiento» que la compañía pretende asumir.

Se trata de la «primera actuación relevante» en la estrategia del Fondo Estratégico de 250 millones que impulsa el Ejecutivo para tratar de «garantizar el crecimiento y el arraigo de empresas con potencialidad tecnológica y de internacionalización». Esta compra a Kutxabank es un primer paso del Fondo, con una trayectoria aún sin definir, que contará con 100 millones de dinero público esta legislatura y 150 millones que deben captarse de inversores privados.

Nuevo contrato de tranvías para Budapest

Poco después de que el Gobierno de Iñigo Urkullu diera cuenta de su entrada en el capital de CAF, la compañía informó de que ha suscrito un contrato con la empresa responsable del transporte de Budapest para suministrarle 26 nuevos tranvías por un importe de 55 millones de euros.

La capital de Hungría cuenta con una extensa red ferroviaria que abarca cerca de 40 líneas. CAF firmó en 2014 el primer contrato con Budapesti Közlekedési Központ, para la entrega de 37 tranvías.GARA