«Es hora de que la cuestión de las y los exiliados y deportados políticos vascos adquiera la relevancia que merece en el esquema de una solución integral al conflicto político y armado vivido en Euskal Herria y a sus consecuencias». Esta es una de las conclusiones a las que llegaron los participantes en la asamblea de antiguos exiliados y deportados, celebrada ayer en la sala Antonie D’Abbadie de Hendaia.

En un comunicado, los allí presentes indicaron que siguen considerando que «una salida política negociada que propicie una solución democrática al conflicto y por tanto aborde tanto sus causas como sus consecuencias, todas sus consecuencias, es la fórmula ideal para avanzar en ese camino».

«Sin embargo, es evidente que el Gobierno español no solo se niega a andar ese camino, sino que pretende utilizar la cuestión de los y las presas y exiliadas como instrumento para bloquear cualquier avance en una solución política», destacaron, y recordaron que en los debates previos a la Declaración de Biarritz, presentada en junio de 2013, el Colectivo de Refugiados y Deportado Políticos Vascos (EIPK) mostró su compromiso con «una solución integral» y su disposición a dar «los pasos necesarios para el impulso de la misma junto con la necesidad de ir ganando espacios de libertad para seguir dando nuevos pasos».

Asimismo, EIPK reafirmó «el compromiso de las y los exiliados y deportados que lograsen volver a su casas para seguir trabajando hasta hacer posible la vuelta de todos y todas las exiliadas políticas vascas». En este sentido, conviene recordar que, desde que se presentó la Declaración de Biarritz, han sido más de 130 los represaliados que han vuelto a pisar las calles de sus pueblos y ciudades.

Cita del Foro Social

Los asistentes a la asamblea de ayer reafirmaron los compromisos esgrimidos por los integrantes de EIPK, que en 2013 ya anunciaron que estaban dispuestos a «dar los pasos que estén en nuestra mano» para lograr el retorno de todos los represaliados. Lo ratificaron «poniendo el acento en la necesidad de comenzar a socializar la realidad actual de las personas exiliadas y deportadas, con el objetivo de colocar la cuestión en la agenda y el debate social como paso previo imprescindible para avanzar en la búsqueda de soluciones». E hicieron hincapié en la importancia del evento organizado por el Foro Social para abordar la problemática del exilio y la deportación. Una cita que tendrá lugar el viernes y el sábado de la semana que viene en Ficoba.

A este respecto, señalaron que «es en Euskal Herria primero, con el apoyo de la comunidad internacional después, donde se deben dar los consensos necesarios para avanzar en este camino». Por ello, tendieron la mano al conjunto de la sociedad vasca, «a sus agentes sociales, sindicales, políticos e institucionales». Ellos son los destinatarios de la dinámica iniciada por quienes se vieron obligados a abandonar su hogar.