Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), reflejan una bajada del paro durante los últimos doce meses del curso anterior. En el caso de la CAV la tasa de paro ha caído más de un punto porcentual, del 12,6% al 11,1%, y en el de Nafarroa el descenso ha sido de casi cuatro décimas, del 10,01% al 9,63%. Así, al cierre de 2017 la tasa de desempleo en Hego Euskal Herria se situó en 10,36%, lo que en términos absolutos se traduce en 138.200 parados. Una cifra a la que se deben sumar los 12.000 desempleados de Ipar Euskal Herria, lo que arroja una tasa global del 10,19% (10,52% si se toman como referencia los datos del Eustat en lugar de los del INE).

La mayoría de estos números están recogidos en una nota de prensa remitida por Gaindegia, que incluye datos de los últimos seis años. Las estadísticas revelan una mejoría paulatina de la tasa de desempleo desde el curso 2014, aunque esta continúa muy lejos de los porcentajes previos a la crisis económica. A finales del año 2007, por ejemplo, el número de personas sin empleo en Hego Euskal Herria era de 73.700, casi la mitad de las que hay a día de hoy. Y el porcentaje de paro era del 5,41%, lejos del 10,36% actual. En los últimos diez años se han destruido miles de empleos y Euskal Herria ha quedado relegada a los últimos puestos si se comparan los datos de desempleo con el resto de Europa. Basta con indicar que la tasa de paro supera en 2,8 puntos la media de la UE.

Un dato del que se hizo eco ELA, que ayer alertó de que la evolución de la tasa de desempleo «está siendo utilizada para tratar de ocultar que la situación del empleo es notablemente peor que la de hace diez años, a pesar de que el nivel de riqueza generada es claramente superior». En este sentido, la central indicó que, pese a que en la última década la población de Hego Euskal Herria ha aumentado en 36.600 personas, la población activa, la población ocupada y la asalariada han disminuido en 49.200, 110.700 y 22.800 personas respectivamente. «En cambio, en este mismo periodo la economía ha crecido un 9,7%», añadió el sindicato, que insistió en que los datos del empleo «no son buenos. La bajada del paro se hace a costa de las condiciones laborales».

Esta opinión es compartida por LAB, que incidió en que el empleo creado durante el último trimestre de 2017 «ha sido temporal y a jornada parcial». «En concreto, el número de puestos de trabajo de carácter indefinido marca una ligera tendencia a la baja, y en términos netos, todo el empleo creado ha sido en base a contratos temporales», señaló el sindicato abertzale, que alertó de que el año pasado se firmaron 1,3 millones de contratos en Hego Euskal Herria, «y el 93% fueron temporales. Esta evolución ha colocado la tasa de temporalidad en el 25,4% de la población asalariada, aunque en el caso de las mujeres este porcentaje asciende al 27,6%».

Con respecto al tipo de jornada, LAB indicó que el último trimestre del año había 13.200 personas más trabajando a tiempo parcial en comparación con el trimestre anterior, y 1.200 menos ocupadas a tiempo completo. «Todos estos datos evidencian que el uso abusivo de la contratación precaria se ha instalado en la cultura empresarial como modelo de gestión. Sus consecuencias están a la vista, y son la raíz del problema que impide la mejora de las condiciones laborales y salariales en términos justos y razonables», añadió antes de poner de manifiesto que dos tercios de las personas en desempleo no reciben ninguna prestación.

Por su parte, CCOO Euskadi subrayó que los datos de temporalidad «nos deben situar en estado de alerta sobre el futuro y muy especialmente sobre la protección social y el tipo de empleos que se están creando». «Frente a esta realidad CCOO exige a la Administración Pública Vasca que se comprometa de manera activa con la creación de empleo de calidad, con un presupuesto que priorice las partidas para el empleo y la protección social y con un mayor compromiso con el dialogo social abierto con los agentes sociales», destacó la central confederal.

A este respecto, UGT Nafarroa denunció que la Administración Pública «se ha erigido en un factor determinante de la temporalidad, ya que entre los empleados públicos se eleva al 29%, 2,6 puntos más que en el mismo periodo de 2016». Ante esta situación, el sindicato reclamó al Gobierno foral que «ponga en marcha con urgencia el Plan de Empleo de Navarra y active medidas destinadas a eliminar las desigualdades existentes en nuestro mercado de trabajo».

Respuesta institucional

La valoración crítica de los sindicatos choca con el optimismo de los representantes institucionales, que saludaron los datos de la EPA. «Siendo normalmente el último trimestre complejo, se puede hacer una valoración positiva», indicó el vicepresidente de Desarrollo Económico de Nafarroa, Manu Ayerdi, quien reconoció que, pese a que la tendencia «es buena, es positiva, me quedo con lo que nos queda por hacer». A su juicio, es necesario «no perder la prudencia y la perspectiva y poner el foco en lo que queda por conseguir».

El lehendakari, Iñigo Urkullu, también saludó los «indicadores positivos» de la economía de la CAV y defendió la necesidad de «trabajar juntos al servicio de la recuperación económica y de la generación de oportunidades de empleo de calidad».

EL Polo de Empleo ya no publicará datos mensuales, sino trimestrales

En contra de lo que era habitual, el «Pôle emploi» (el instituto de empleo estatal) no publicará este mes los datos sobre el paro en el Estado francés, ya que a partir de ahora solo lo hara trimestralmente. De esta forma, el próximo informe llegará en abril y hará referencia a la evolución registrada en el primer trimestre del año.

Este cambio ha venido motivado por las continuas críticas recibidas sobre la fiabilidad de los datos emitidos por el servicio de estadística del Polo de Empleo (Dares), que, por su parte, considera que la evolución mensual «no es significativa», por lo que «no tiene sentido» seguir haciéndolo.

Lo cierto es que la preocupación sobre esta cuestión había llegado incluso al Gabinete de Emmanuel Macron y, como recordaba ayer el diario “Le Monde”, la propia ministra de Trabajo, Muriel Pénicaud, indicó que en adelante no iba a valorar este indicador porque, a su juicio, «no refleja nada bien» la evolución del mercado laboral.

De por sí, el sistema de clasificación de las personas en paro es ya muy complicado, puesto que hay cinco categorías: en la A se incluye a todas las que, pese a buscar empleo, no han tenido ninguna actividad en el periodo estudiado, mientras que en el B están quienes han tenido una actividad reducida, de 78 horas como máximo al mes, y así sucesivamente. En conjunto, la tasa de paro se mueve entre el 9% y el 10% en el Estado francés.

Por tanto, los nuevos informes del Polo de Empleo se publicarán al mismo ritmo que los del Insee (Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos), si bien estos no se basan en las demandas de empleo registradas, sino en una encuesta, similar a la EPA, que se realiza entre unas 180.000 personas y cuyos resultados son más estables que los del Dares.GARA