El suicidio de Ekai, el adolescente de 16 años de Ondarroa, ha puesto el foco sobre la durísima situación de los menores transexuales y sus familias, además de reavivar el debate sobre los protocolos existentes, que la asociación Chrysallis insta a adelantar y a acelerar. Su aita, Elaxar Lersundi, ha hecho público un conmovedor mensaje de despedida que remarca el deseo de que este sea el último caso similar que concluye fatalmente.

En las redes sociales, junto a una foto del joven, Lersundi señala en nombre de la familia: «Sé que tu ida no será en vano y, como tú decías mil y una veces, en muchas cosas, que al menos sirva para allanar el camino a los que vengan por detrás. Espero que tú, mi genio, Ekai, seas el último».

«Pensaba que era más fuerte y duro de lo que soy pero, aun así, respeto tu decisión de irte cuando tú has elegido –comienza esta misiva pública dirigida a su hijo–. No lo comparto y me gustaría maldecirte por lo que te has hecho y nos has hecho, pero tan solo puedo seguir queriéndote, no más que antes, ya que no se puede querer más de lo que te queríamos», subraya Lersundi.

Añade su aita, siempre en referencia a Ekai, que «eras un genio en todo, escribiendo historias, dibujando, bailando, en idiomas, en fotografía, etc, etc, etc. Incluso, a nuestro pesar, también has sido un genio al lograr tu meta y tu paz».

Parlamento navarro

La muerte de Ekai ha tenido impacto en toda Euskal Herria, como muestra la declaración institucional aprobada ayer por el Parlamento navarro. Se «lamenta profundamente» lo ocurrido y se incide en la necesidad de prevenir este tipo de situaciones de manera que los menores puedan autodeterminarse en libertad en relación a su identidad sexual y de género.

Junto a ello, se solicita al Gobierno navarro el pronto desarrollo de la Ley de 2017 para la Igualdad Social de las Personas LGTBI+, considerada una de las más progresistas del entorno. La declaración fue presentada por los cuatro grupos de la mayoria el PSN, y solo el PP se desmarcó en uno de los puntos.