El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, reclamó ante el Consejo de Seguridad de la ONU la celebración de una conferencia internacional para intentar relanzar el proceso de paz con los israelíes.

En una larga e inusual intervención ante la más alta instancia de la ONU, donde no hablaba desde 2009, Abbas pidió también a los países que no lo han hecho que reconozcan al Estado palestino precisando que, de las 193 integrantes del organismo, 138 ya lo han reconocido.

«Para resolver el tema palestino, es esencial establecer un mecanismo internacional multilateral que sea decidido en una conferencia internacional», afirmó. «¡Ayúdennos!», pidió Abbas, vivamente aplaudido al término de su intervención, tras la cual abandonó la sala.

Según Abbas, dicha conferencia internacional tiene que desembocar en la integración de Palestina como Estado miembro de la ONU, el reconocimiento mutuo con Israel y la creación de un nuevo mecanismo internacional encargado de asistir a las dos partes en sus negociaciones para llegar a un acuerdo de paz definitivo.

Durante el periodo de negociaciones, todas las partes se abstendrían de «acciones unilaterales», dijo Abbas. Ello incluye el cese de la construcción de colonias y la suspensión del traslado de la Embajada de EEUU a Jerusalén, mientras que Palestina se abstendría de tratar de unirse a nuevas organizaciones y tratados internacionales.

«Estamos listos para empezar negociaciones inmediatamente», insistió Abbas, cuya propuesta es apoyada por la OLP.

Su alocución se produjo en plena preocupación global tras la decisión de Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel, que Abbas volvió a criticar con dureza, pidiendo que sea también la capital del futuro Estado palestino.

Responsabilizó del fracaso de las negociaciones de paz a Israel que, según él, «actúa por encima de la ley». «Ha transformado la ocupación pasando de una situación temporal, según el derecho internacional, a una situación de colonización y asenta- miento permanente», subrayó.

Abbas se niega a mantener contactos directos con el Gobierno de Trump desde que éste entregara Jerusalén a Israel, una decisión que desacreditó a EEUU como mediador en el proceso de paz en Medio Oriente a ojos de los palestinos.

Sin embargo, la embajadora de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, señaló que su país está «preparado para hablar» de paz con los palestinos y lo hizo sentada junto al principal «negociador» de Trump: su yerno y asesor Jared Kushner. «No correremos detrás de nadie», dijo Haley.

El embajador de Israel, Danny Danon, consideró a Abbas parte del problema y recalcó que la única forma de avanzar es con negociaciones directas.