Amaia U. LASAGABASTER
PRIMERA FEMENINA

Una temporada de novedades e incógnitas

Arranca la competición con equipos muy reforzados y con cambio en el formato de la Copa.

Con el encuentro que enfrenta hoy al recién ascendido Málaga y al campeón Atlético (16.00 horas, parece que a las mujeres les afecta menos el calor) echa a andar la temporada en Primera Femenina. O Liga Iberdrola, como se le denomina desde hace dos años y se le seguirá llamando por al menos otros tres tras la reciente renovación del acuerdo entre la Federación Española y la empresa energética.

El nuevo curso parece prolongar la tónica de los últimos, con una mayor inversión económica de los equipos –aunque las diferencias de cabeza a cola son muy notables–, un camino hacia la profesionalización por el que se sigue avanzando aunque sea lentamente, la incorporación de extranjeras que volverá a suponer un récord, el arbitraje a cargo de mujeres –ascienden Arantza Gallastegi e Iragartze Fernández–, las retransmisiones televisivas –de nuevo cuatro partidos por jornada en Gol y BeIn–, que tanto a nivel de clubes como de selecciones van creciendo en cuota de pantalla...

Pero la temporada también llega con novedades. Al margen del nuevo impulso que parece querer dar al fútbol la Federación de Luis Rubiales, con el navarro Rafa del Amo al frente del Comité de Fútbol Femenino, y que tendrá que ir viéndose con el tiempo, pasan principalmente por el nuevo formato de la Copa, en la que participarán todos los equipos de Primera y que se disputará entre noviembre y mayo. Novedad que conlleva también una de las grandes incógnitas: cómo afectará este nuevo planteamiento a la competición liguera. Con la lucha por el título y la clasificación europea acotadísima, la motivación de la mayoría de equipos de Primera pasa por la clasificación copera y la permanencia. Habrá que ver a qué se aferran a partir de noviembre –se jugarán entonces los octavos, en enero los cuartos, en febrero las semifinales y en mayo la final–, tanto si van superando etapas en Copa como si no.

A nivel personal, las futbolistas sí tendrán una motivación extra a lo largo de los próximos meses, teniendo en cuenta que Francia acogerá el Mundial a partir del siete de junio, justo un mes después de que concluya la Liga.

El signo de interrogación, claro, también se dibuja sobre el rendimiento deportivo de los equipos. Más allá de que con los presupuestos en la mano sea relativamente sencillo jugar a adivino, la mayoría de las plantillas de la categoría se ha renovado muchísimo y mover la chequera con alegría no siempre asegura el acierto. Hasta el día de hoy se ha realizado un centenar de movimientos –desde el único fichaje de Marta Unzue, además del ascenso de Oihane Hernández y Ane Azcona, por parte del Athletic, hasta los diez del Málaga–: 39 jugadoras han cambiado de equipo, 41 han llegado desde otras Ligas y 16 han subido desde Segunda, incluyendo las dos del filial rojiblanco y ocho futbolistas del Zaragoza, que si ya veía esquilmada su plantilla anualmente estando en Primera, qué decir ahora que ha perdido la categoría.

Si en número la palma se la llevan Málaga (10), Madrid (9) y Atlético, EDF, Levante y Sporting de Huelva (8), en relevancia éste ha sido el verano del Levante, que parece decidido a plantar cara a Atlético y Barcelona. Su mejor fichaje ha sido, probablemente, la renovación de la pitxitxi Charlyn Corral, que ahora se verá acompañada en ataque por la excolchonera Sonia Bermúdez. Claudia Zornoza, que deja la Real un año después de su llegada, Ruth García, Marta Corredera, Ivana Andrés, Ona Battle, Andrea Paraluta o la gran perla del fútbol español y una de las sensaciones del pasado Europeo sisub17 Eva Navarro también se han sumado al proyecto azulgrana. También son ocho las incorporaciones del Atlético, incluyendo seis futbolistas extranjeras, Olga García que vuela desde Barcelona y, a la cabeza, Jenni Hermoso. Formada en las categorías del equipo colchonero, la artillera vuelve a casa tras su paso por Rayo, Tyreso, Barcelona y PSG. El Barcelona, por su parte, ha mantenido la línea de la última temporada, aunque con menor número de incorporaciones. Ha fichado a dos buenas futbolistas de Primera (Andrea Pereira y Pamela Tajonar) y a dos extranjeras con experiencia, nombre y palmarés aunque un peldañito por debajo de ese puñado de estrellas que se reparten entre apenas cinco o seis equipos europeos: Hamraoui y Van der Gragt.

Son los tres equipos con las esperanzas más evidentes, junto a los más modestos Fundación Albacete, Sporting de Huelva, Rayo o los recién ascendidos Málaga y EDF, cuya ilusión pasa, sobre el papel, por mantener la categoría y, por qué no, intentar dar una campanada en Copa. El resto lo tiene más complicado para definir objetivos en Liga. Incluyendo a Athletic y Real.

«Lo más arriba posible»

Sólo hace dos años y tres meses que las rojiblancas lograron su último título de Liga. Pero si ya entonces resultó poco menos que increíble, como sumamente meritorio fue el tercer puesto de la temporada pasada, la dificultad ha seguido creciendo, con un aumento general de la inversión y un mercado totalmente globalizado.

Así que el Athletic intenta reforzarse mirando hacia dentro. En un doble sentido. Mejorando las condiciones de sus futbolistas, cuyos entrenamientos este curso se desarrollarán por las mañanas, y con protagonismo para la cantera. Con Marta Unzue –cedida por el Barcelona hasta 2020– como único fichaje, el club asciende a Oihane Hernández y Ane Azcona y, pese a la relevancia indiscutible de las Ainhoa, Erika, Nekane o Gimbert, aguarda con ilusión el paso adelante de las generaciones más jóvenes, encabezadas por Damaris Egurrola y Maite Oroz.

El objetivo según Joseba Agirre, por cuarta temporada en el banquillo, «competir» cada partido para acabar lo más arriba posible y «seguir creciendo».

En eso no se diferencia demasiado de la Real. El equipo txuriurdin, que también incluirá sesiones de entrenamiento matinales esta campaña, quiere «seguir creciendo y competir cada vez mejor, ir partido a partido e intentar sumar el mayor número de puntos posible», asegura Gonzalo Arconada, que comienza su segunda campaña al frente del equipo, al que llegó en noviembre del pasado año.

Lo intentará con un equipo un tanto huérfano de veteranas, con Ramajo lesionada y tras la marcha de Gastearena y Cornejo, aunque no parece que futbolistas jóvenes como Nahikari o Mariasun Quiñones vayan a tener problemas para asumir ese rol. Y sumamente renovado con la incorporación de seis futbolistas: Maddi Torre (Betis), Oihana Aldai (Zaragoza), Sara Olaizola (Oiartzun), Marta Cardona (Levante), Kiana Palacios (LA Galaxy) y Carla Bautista (cedida por el Atlético.

 

La Segunda también arranca con cambios importantes

La Segunda División también arranca este fin de semana. Los once equipos vascos, incluyendo a los ascendidos Bizkerre y Berriozar, comparten el Grupo II con los riojanos Atlético Revellín y Pradejón y el zaragozano CD Oliver.

Además del Athletic B, y tras el ascenso del EDF, Eibar y Alavés parecen los equipos llamados a pelear por el título, después de la considerable inversión que han realizado en la profunda renovación de sus plantillas. El play-off es el objetivo evidente de ambos equipos, en una temporada que dará paso a una transformación de la categoría.

O más bien a la creación de una nueva. Como hasta ahora, los vencedores de Segunda disputarán un play-off del que saldrán los dos ascensos. Pero el próximo curso, los perdedores del play-off, junto a los 2º, 3º y 4º clasificados de cada grupo, conformarán la Primera B. Además, este año no habrá descensos de Segunda. A.U.L.