Ramón SOLA
PRESENTACIÓN DE «AMAREN ETXEA»

DOLOR Y AMOR, TAN LEJOS Y TAN CERCA

ES LA RADIOGRAFÍA DE «UNA ESCABECHINA» –ASÍ LA RESUMIÓ UN FAMILIAR–, PERO TAMBIÉN UNA INMENSA HISTORIA DE AMOR. UN LIBRO CARGADO DE «ÉPICA» Y QUE SIN EMBARGO ESTABA SIN ESCRIBIR. JOKIN URAIN LO HA REDACTADO, PERO LOS AUTORES SON REALMENTE LOS FAMILIARES DE PRESOS. «AMAREN ETXEA» BUCEA EN SUS DOLORES E ILUSIONES.

Y la semilla de este libro está precisamente en el día en el que Jokin Urain salió de la cárcel de Herrera, tras más de 26 años entre rejas, y puso rumbo a casa. «Tenía unas ganas increíbles de llegar, así que el camino se me hizo interminable, eterno, e inmediatamente pensé cómo se les haría de largo a los familiares que hacen tantos y tantos viajes así», explicaba ayer tarde en la sala llena del Museo San Telmo. Dicho y hecho, en los últimos años ha recogido en una labor de auténtica hormiga un centenar de testimonios, de modo oral o escrito, además de extractos de entrevistas de prensa que componen este mosaico. Y los ha cosido con pulso de costurero para conformar este mosaico vibrante.

«Muchos de los testimonios son dolorosos –admite en el prólogo Jokin Urain– , voces del sufrimiento, de la impotencia, del llanto y de la alegría. Pero por encima de todo son voces de la esperanza y del amor». En la presentación de ayer recordó cómo uno de estos familiares le resumió en una conversación telefónica que «lo que nos hacen es una escabechina», y efectivamente el libro recoge toda esa parte dramática –«la de los familiares es una gran épica», constató el autor–, pero también constituye una recopilación de cariño, solidaridad y cooperación que deja «momentos sublimes» en palabras del editor, Fermin Munarriz.

Las conversaciones se han estructurado en bloques temáticos, formando historias propias. Algunas situaciones son muy reconocibles por lo concreto, como «El vis a vis», «Viaje sin retorno, morir en la carretera», «Mirentxin» o «Nacer en la cárcel». Otras resultan más etéreas en su formulación, pero son igualmente reales: «Euskal Herria, el hogar, es Itaca», «La vida no se detiene», «Territorio de nuevas relaciones y amores», «Las huellas en el camino»...

Destaca, desde el propio título del libro, la potente referencia de la madre de la persona presa. «Es una figura universal», recuerda Jokin Urain evocando el impactante libro de Máximo Gorki, la lucha de las Madres de Mayo, la canción sobre sus «oinazes» que Atahualpa Yupanqui dedicó a su madre vasca y, cómo no, las amatxos de Etxerat. «El libro no podría tener otro título», aseguró el autor: Amaren etxea, la casa de la madre, es el principio de todo y también el fin, el destino con que sueñan por igual presos y familiares. Añadió el autor que la amatxo es al fin y al cabo «la primera que va a pedir cuentas a comisaría, la primera que entra en prisión a dar la cara....».

Dos vivencias entre mil

Junto a Urain se sentaron tres personas con diferentes perfiles que representan la pluralidad de las vivencias de los familiares, y en coherencia con lo anterior las tres eran mujeres.

Belén Aurrekoetxea ha conocido y padecido la prisión primero en carne propia, luego como madre y ahora también como abuela. En su intervención detalló las diferentes fases por las que pasa una familiar, desde el shock inicial por la huida o la detención a los «larguísimos» días de la comisaría, después la toma de conciencia de que la prisión ha llegado a su vida para quedarse y, finalmente, la asunción de lo inevitable: «No te acostumbras, pero aprendes a vivir con ello».

«Algunas épocas son más estables y se agradece, pero a veces vienen golpes duros», indicó. En su caso concreto citó el momento en el que leyó el relato de torturas hecho por su hija o cuando desde prisión llegaban noticias de problemas de salud.

Olatz Iglesias comenzó a entrar en la cárcel siendo todavía bebé, puesto que a su madre la encarcelaron cuando apenas tenía nueve meses de vida. Luego fue apresado también su aita. Al extraditarla a ella, con apenas seis años tenía que viajar un fin de semana al mes a París y otro a Madrid. Hoy ha cumplido 23 pero sigue sufriendo el alejamiento de su aita: «Lo más difícil es tener una relación normalizada con quien está dentro. Si en vez de en Villena estuviera en Zaballa, o si las conversaciones no estuvieran intervenidas... todo sería más fácil», dijo.

La difusión de la problemática de los «niños y niñas de la mochila» tiene en su voz una potencia enorme. Retrocedió a la niñez para evocar cómo cuando iba a ver a su madre a Fresnes «jugábamos, cantábamos, pintábamos si nos dejaban alguna pintura... Cuando eres bebé no te das cuenta de qué supone un viaje de ese calibre, y menos cuando las personas que te acompañan [sus abuelos primero, luego también los tíos] te protegen y te camuflan todo eso como pueden, por ejemplo aprovechando el viaje para ver Disneylandia».

Llegada la fase de la ikastola, Iglesias rememoró la carga que suponía para ella perderse «cosas pequeñas pero que cuando eres niña parecen muy grandes», como el cumpleaños de una amiga, el partido de baloncesto, la excursión del viernes o del lunes... «todo eso que forja la personalidad de una niña».

El valor del libro

La hija de Juan Carlos Iglesias y Nagore Mujika concluyó poniendo en valor este libro –fue una tarde cargada de agradecimientos, del autor a los familiares y de los familiares al autor y al editor–. Considera que «contar todo esto es muy importante porque nadie lo había hecho así y porque nos puede abrir puertas». Y a ello se refirió acto seguido Patricia Vélez, igualmente familiar y además portavoz de Etxerat: «Para quienes no padecen esto, conocerlo será enriquecedor; y para quienes sí lo han sufrido o lo sufren, el libro da trascendencia a esta realidad y es importante también para sentirte reconocido y para silenciar los fantasmas. Nos servirá para avanzar», resumió.

Vélez apeló a la empatía, recordando que a Etxerat se la reclaman muchas veces pero que «tiene que ser algo colectivo». Este mosaico de testimonios puede ayudar a ello. Y también el paso dado por los propios familiares en estos años y que reconoció desde Etxerat: «Nos dimos cuenta de que siempre denunciábamos más las vulneraciones de los derechos de las personas presas que las que estábamos sufriendo nosotras». Y en ese cambio de prisma han llegado campañas con mucho impacto social como la visibilización de los «niños y niñas de la mochila», la de los padres-madres o abuelos de edad avanzada que no pueden acudir ya a cárceles tan alejadas, la de los familiares de los presos que sufren enfermedades graves, y la más dramática por irreparable: las dieciséis personas que han perdido la vida yendo y viniendo por la dispersión.

El acto resultó reconfortante para una comunidad muy castigada por la política penitenciaria, pero que mantiene «la esperanza y la fuerza», términos que remarcó Jokin Urain. A la salida había ganas de tomar en las manos los primeros ejemplares de este ‘‘Amaren etxea’’ que podrá adquirirse ya por Naiz Denda antes de llegar a Durango y a los kioskos, en euskara y castellano.

 

Intervenciones

«Esta es una historia de constancia y de sufrimiento, la de los familiares es una gran épica»

JOKIN URAIN

Exprisionero y autor del libro

«De bebé no te das cuenta, con los años eres consciente del sacrificio económico o la repercusión emocional»

OLATZ IGLESIAS

«Niña de la mochila»

«No te acostumbras a la cárcel, pero aprendes a vivir con ello. Y tienes que estar fuerte porque lo necesitan»

BELEN AURREKOETXEA

Familiar

«La solidaridad entre los familiares no acorta el camino, pero al menos sí lo hace más dulce»

PATRICIA VÉLEZ

Etxerat

 

PRESOEN SENIDEEN EPIKA, LIBURU BATEAN BILDURIK

«Presoen senideen epika» aipatu zuen Jokin Urain liburuaren egileak aurkezpenean, eta ez da gutxiagorako. Hori aukeratu gabe, bederatzi hilabete baino ez zituela espetxe urrutiratuetara eraman behar izan zuten Olatz Iglesias ama ikus zezan, eta gaur 23 urte dituela oraindik aitarekin egoteko bidaia luze-luzeak egin behar ditu. Belen Aurrekoetxea lehenik presoa, gero preso baten ama eta oraindik espetxean den ume baten amona da. Patricia Velezekin batera, ‘‘Amaren etxea’’ liburuaren aurkezpenean hartu zuten parte.