Helvetia Anaitasuna afronta el partido ante el Frigoríficos Morrazo Cangas, que se disputará esta noche (20:30 horas) en ‘La Catedral’, con el objetivo de recuperar la senda de la victoria en la Liga, tras sufrir tres derrotas consecutivas. En concreto, a la última en el Palau Blaugrana ante el líder, el Barça Lassa (35-26), hay que sumarle los resultados negativos de los encuentros ante el Recoletas Altético Valladolid (28-33) y Liberbank Cuenca (32-25).

No obstante, el equipo iruindarra llega al duelo en una posición más cómoda que su rival, aún inmerso en la pelea por la permanencia y, por tanto, más necesitado de puntos. Así, desde la relativa tranquilidad que otorga la undécima posición, los pupilos de Iñaki Aniz buscarán sumar el sexto triunfo en su pista y, a falta de cinco jornadas para el final de la temporada, otear la posibilidad de subir puestos en la clasificación.

Pos su parte, Cangas buscará la victoria que le permita alcanzar los 17 puntos que le darían la permanencia virtual en Asobal, ya que dejaría sin margen de error al Condes de Albarei Teucro, su principal rival en la pelea por eludir el descenso. Ambos equipos, que se verán las caras en la penúltima jornada en O Gatañal, están separados por cuatro puntos a falta de diez por jugarse. Por ello, un triunfo gallego hoy en Iruñea añadiría presión a su vecino, que mañana recibe al Ciudad Encantada.

Cuétara lo ve «más cerca»

En cuanto a Bidasoa-Irun, que el domingo (12:00 horas) visita la cancha del Bada Huesca, su entrenador, Jacobo Cuétara, ve a su equipo «cada vez más cerca» de conseguir una plaza para Europa, pero apuesta por centrarse en «ganar partidos» sin mirar a lo que hagan los rivales y dice sobre el rival que «es muy potente en casa» y que «durante casi toda la temporada ha estado en plazas por la lucha por Europa».

La sensación de que Bidasoa tiene casi en la mano el billete europeo es «un motivo de orgullo» para el técnico asturiano. «Disfrutamos un momento de felicidad plena que queremos prolongar lo máximo posible. Pero verlo cada vez más cerca, en un momento determinado nos puede generar presión. Si perdemos en Huesca entrarán los miedos por si luego perdemos contra Guadalajara», advirtió.