El reloj de Orio siempre está en hora; también en A Coruña
Los «aguiluchos» obtuvieron cuatro segundos derenta sobre Santurtzi en la primera jornada de la«III Bandeira Cidade da Coruña», tras dominar laregata. Urdaibai bogará en la tanda honor de hoy.

La regularidad de Orio en este arranque de Liga Eusko Label 2019 es encomiable. No solo es líder sólido de la competición, sino que da la sensación de controlar su tanda a voluntad. Ayer se impuso en la primera jornada de la «III Bandeira Cidade da Coruña», y aunque Santurtzi se arrimara a última hora a escasos 4.06 segundos, lo cierto es que parece difícil arrebatar el triunfo a los «aguilichos».
Sea como fuere, se lleve o no la bandera de tierras galaicas la embarcación de Orio, lo cierto es que remontarle su ventaja se antoja una quimera para sus adversarios. Ya suma 58 puntos, nueve más que Santurtzi y Hondarribia, empatados a 49 en el segundo puerto, mientras que Zierbena, con 46, pierde combaty no estará en la tanda de honor de hoy, después de que Urdaibai haya mostrado su mejor cara, logrando así ganar la segunda tanda para colarse en la tanda de honor por primera vez en lo que va de campaña.
El mejor yendo de proa
Las dificultades más serias que halló ayer Orio llegaron en las dos empopadas, momento en el que la «Sotera» se le fue echando encima. Pero tanto de proa como en las ciabogas no tuvo rival el bote amarillo.
Zierbena saltó al agua con ímpetu, pero después de un muy buen primer largo se le fue la ciaboga y perdió demasiada velocidad, al tiempo que Santurtzi empezaba a meter presión en el primer largo de vuelta. Orio se alejaba de sus rivales mientras que Santurtziu, Hondarribia y Zierbena peleaban con el crono establecido por Urdaibai durante su turno.
Ajeno a la pelea del resto de contendientes, la trainera amarilla surcaba las aguas del Atlántico con facilidad, fruto en buena medida de una mar agradecida y en el que el aire fue bajando de intensidad conforme avanzaba la tarde. Con todo, una «ola larga» –como la bautizó el patrón Gorka Aranberri a sus remeros– invitaba a usar algo más que la fuerza para bogar hacia la meta.
La última empopada de Santurtzi fue, en ese sentido, el único momento de zozobra para Orio. Llegó a situarse a tres segundos, cuando había partido del último viraje a seis. No obstante, Aranberri cazó un buen par de olas casi llegando a meta y volvió a ensanchar el compás lo suficiente para poder relamer el triunfo cosechado ayer y tener algo más de margen de cara a la regata de este mediodía.
El reloj de Orio siempre está en hora y difícilmente se retrasa. Y si los segundos puestos cosechados el pasado fin de semana le valieron para poner puntos de por medio en la clasificación general, si hoy confirma su triunfo de ayer acabará con una ventaja sideral.

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