Koldo LANDALUZE
SECUELA DE «EL RESPLANDOR»

«DOCTOR SUEñO», REGRESO AL HOTEL OVERLOOK

Mike Flanagan ha filmado la adaptación de «Doctor Sueño», la secuela literaria de «El resplandor» de Stephen King. Ewan McGregor interpreta a Daniel Torrance que, en edad adulta, repasa los episodios que vivió siendo niño en el Hotel Overlook.

Stephen King publicó en 2013 “Doctor Sueño”, la secuela literaria de “El resplandor”. Por entonces en el escritor todavía pesaba mucho el choque frontal de acusaciones que compartió con el cineasta Stanley Kubrick y que le llevó a obviar por completo lo que Kubrick legó en la retina del espectador.

Para tener una idea aproximada de la división que se estableció entre el cineasta y el escritor conviene retroceder en el tiempo, en concreto a Zinemaldia del año 80. Presentada como uno de los filmes estelares del año, Kubrick decidió encerrarse en la sala de montaje tras las discretas críticas que recibió. Fruto de ello fueron los diecisiete cortes correspondientes a unos 25 minutos que sufrió el metraje original. Entre las malas críticas que recibió se encontraba la del propio King, quien la describió como «un enorme y precioso cadillac sin motor adentro. Puedes sentarte y disfrutar del olor de la tapicería de cuero, pero no puedes conducirlo a ninguna parte».

La coguionista de la adaptación cinematográfica, Diane Johnson, salió en defensa de la película y respondió al escritor: «Entre nosotros, ‘El resplandor’ no forma parte de la gran literatura. Da miedo, es eficaz y funciona, sin más; no es muy bueno. Pero precisamente es interesante ver cómo un libro bastante malo puede ser también muy eficaz. Lo que es evidente es que la idea, el argumento, es muy bueno. De hecho, Stephen King posee una extraña capacidad para obtener este tipo de efecto, provocar el miedo en el lector. Piensa probablemente que es mejor escritor de lo que en realidad es. ‘El resplandor’ es un libro bastante pretencioso... pero también es cierto que se tienen menos escrúpulos al cortarlo en pedazos, una es consciente de que no se está destruyendo una gran obra de arte».

 

Daniel Torrance y su «resplandor»

Curiosamente, y vistas las primeras imágenes de la adaptación cinematográfica de “Doctor Sueño” que ha rodado el director Mike Flanagan, el filme respeta al detalle el imaginario visual del Hotel Overlook que fue imaginado por Kubrick.

La secuela de “El resplandor” tiene como protagonista a Daniel Torrance, el niño que recorría los pasillos del hotel en su triciclo y que fue testigo directo de la locura que se adueño de su padre, interpretado por Jack Nicholson. Danny Lloyd interpretó este personaje a la edad de cinco años y ahora quien retoma su papel es Ewan McGregor que, en edad adulta, se mete en la piel de un hombre que vive recluido en una pequeña y olvidada localidad.

Dotado de un extraño poder, se sirve de él para aliviar la agonía de los ancianos que están a punto de morir. Todo cambia cuando se encuentra con una niña que tiene sus mismas habilidades y que necesita su ayuda para hacer frente a la inquietante Rose the Hat –interpretada por Rebecca Ferguson– y sus seguidores, quienes se alimentan del “Resplandor de inocentes” en su búsqueda de la inmortalidad.

 

Dos universos reunidos

Curtido en el cine de terror y firmante de la exitosa serie “La maldición de Hill House”, Mike Flanagan tuvo que afrontar varios problemas a la hora de llevar a cabo “Doctor Sueño”. El primero de ellos estaba relacionado con la animadversión que King sentía por la película de Kubrick.

En relación a este punto, Flanagan declaró que «la primera gran conversación que tuvimos fue sobre hacer o no hacer una adaptación de King que tuviera lugar en el universo que Kubrick había creado. Lo primero que hice fue volver a la novela y resultó inevitable no relacionarla con las imágenes de Kubrick. Por ese motivo intenté conseguir el permiso de King para hacer un híbrido. Si la conversación de King no hubiera ido como fue, no habríamos hecho la película. Su opinión sobre la adaptación de Kubrick es conocida y complicada; complicada hasta el punto de que, si has leído ‘Doctor Sueño’, sabrás que activa e intencionadamente ignoró todo lo que Kubrick cambió de su novela, como diciendo de forma desafiante: ‘No, esto no existe en el universo de Kubrick’».

A pesar de semejante hándicap, Flanagan –quien ya había trasladado a la pantalla la novela de Stephen King “El juego de Gerald” (2017)–, se empleó a fondo en intentar convencer al escritor y unir ambos universos. En este punto, el director dijo que «terminamos la conversación no solo con su permiso, sino también con su entusiasmo. Cuando le envié el borrador del guion le gustó y cuando terminó el proceso de posproducción, la película fue enviada tanto a Stephen King como a los familiares de Kubrick. Ambos visionados transcurrieron muy bien y nos dio esperanza de continuar, porque si había algún universo donde King y la familia de Stanley podían amar igualmente la película, era todo un sueño».

Fruto de este empeño es una reconstrucción muy fiel de lo que originalmente diseñó el prestigioso director artístico Ray Walker, el cual recorrió durante meses todo Estados Unidos fotografiando hoteles. Según el propio Walker, «el exterior del hotel Overlook está basado en un hotel de Colorado, y los interiores, de muchos sitios distintos, son todos existentes. El retrete rojo y blanco, por ejemplo, donde Jack habla con el camarero Grady, es un retrete construido a imagen y semejanza de otro que encontré en un hotel de Phoenix. La fachada principal, por su parte, se inspira en un complejo turístico de las montañas de Oregón».

 

un hotel solitario llamado stanley

Tras “Carrie” y “El misterio de Salem’s Lot”, Stephen King quiso probar con algo nuevo para su tercera obra larga. Su intención fue abandonar Maine y buscar nuevas escenografías en las que desarrollar la trama y, para tal fin, abrió un atlas de Estados Unidos y señaló al azar un lugar; fruto de esta decisión caprichosa, Stephen King y su familia se dirigieron a un lugar ubicado en Colorado llamado Boulder. La noche del 30 de octubre de 1974, Stephen King y su familia –alojados en la habitación 237– fueron los únicos huéspedes del Hotel Stanley.

Según recordó King, «a excepción de las nuestras, todas las sillas estaban encima de las mesas. Mientras, una música hacía eco en el pasillo, se asomaron las primeras ideas y cuando me fui a la cama esa noche, tuve el libro en mi mente».K.L.