El nuevo jugador del Kirolbet Baskonia Nik Stauskas apuntó ayer que llega con el papel de anotador, pero se puso «al servicio del equipo» y prometió hacer lo que este «necesite». El escolta canadiense, que vestirá el dorsal 22 y firmó un contrato por una temporada, viene después de jugar cinco años en la NBA, donde tuvo varias propuestas para continuar, aunque decidió «cambiar de aires».

«Jugar en la NBA siempre fue un objetivo y lo hice durante cinco años, pero sin el éxito que yo esperaba», confesó en la rueda de prensa de presentación –hoy será la de Pierrá Henry–. Añadió que vio con buenos ojos la oportunidad de fichar por Baskonia para competir «al más alto nivel» en la Euroliga y en la ACB, donde cree que puede crecer. Se mostró «entusiasmado» y considera que puede «mejorar como jugador en un entorno distinto» al habitual.

Asumió el papel de anotador en el equipo de Perasovic, una habilidad que ha tenido durante toda su carrera, pero manifestó que no ha sido un comienzo fácil porque ya desde los primeros entrenamientos ha visto que «es un estilo de juego diferente. Incluso el movimiento de los jugadores es distinto, pero he venido aquí con el entusiasmo de aprender y mejorar y esto me puede ayudar a entender el juego a un nivel más alto», aceptó el canadiense, quien insistió en que quiere «aprender y ser parte del equipo» y puso su «experiencia» estadounidense al servicio de un equipo al que se está intentando adaptar.

Subrayó que tiene que aprender lo quiere Perasovic y expuso que ya se ha percatado de que al equipo le gusta «la presión en defensa en toda la pista», algo que no se suele hacer en la NBA, así como «la presión al balón y la rotación defensiva».

Por su parte, el director deportivo, Félix Fernández, consideró «fundamental» que Stauskas pueda comenzar la pretem- porada desde el inicio porque los primeros partidos le irán bien «para conocer el juego, el estilo y los arbitrajes, porque a este tipo de jugadores les cuesta entrar en este engranaje».