Los documentales biográficos son realmente importantes cuando trascienden más allá de los límites individuales de los personajes que retratan, ofreciendo una lectura de nuestra cultura y sociedad en un sentido más amplio. Por supuesto que el nuevo trabajo del prestigioso documentalista británico Nick Broomfield es ante todo una historia de amor, como no podía serlo de otra forma, pero además se preocupa de indagar en la egoísta relación entre el artista y sus musas, porque una musa ha de conformarse con servir de inspiración, sin poder reclamar formar parte del espacio vital del creador. Incluso cabe verlo como una manera de machismo intelectual, al que los grandes cantautores del pasado siglo no fueron ajenos.

“Marianne & Leonard: Words of Love” (2019) toma como modelo del emparejamiento imposible entre artista y musa al cantante canadiense Leonard Cohen y a su novia noruega Marianne Ihlen, a la que dedicó su mítico tema “So Long, Marianne”. Su presencia en la película, debido al fallecimiento de ambos en el año 2016 con tres meses de separación entre ella y él, se circunscribe a material de archivo, con especial atención a los textos de las canciones y poemas de amor que Cohen le escribió a lo largo de su existencia. Las entrevistas y testimonios cercanos, como el de la cantante Judy Collins, complementan el largometraje. El relato retrospectivo se remonta a inicios de los años 60, cuando se conocieron en la isla griega de Hydra, donde se había establecido una comunidad bohemia extranjera. Pero en cuanto el cantante comenzó a girar profesionalmente, el distanciamiento físico se fue imponiendo, sin perder la amistad.