GARA
WASHINGTON

El BM prevé altos precios de energía y alimentos hasta finales de 2024

Los precios de la energía y los alimentos se mantendrán en niveles «históricamente altos» hasta fines de 2024 debido a la guerra en Ucrania, augura el Banco Mundial (BM) en su último informe. «La subida de los precios de los productos básicos exacerba las presiones inflacionarias, ya elevadas en todo el mundo», apunta el dossier.

Según las últimas ‘Perspectivas de los mercados de productos básicos’ (Commodity Markets Outlook), informe del Banco Mundial publicado el martes, los precios de la energía se incrementarán más del 50% en 2022, antes de moderarse en 2023 y 2024; en tanto que los precios de los productos no energéticos, incluidos los agrícolas y metales, aumentarán casi un 20% en 2022.

Si la guerra se prolonga o Rusia recibe más sanciones por su invasión a Ucrania, los precios podrían subir más y mostrar aún más volatilidad.

«En conjunto, esto representa la mayor crisis de productos básicos que hemos experimentado desde la década de 1970», dijo en un comunicado Indermit Gill, vicepresidente de Crecimiento Equitativo, Finanzas e Instituciones del BM.

El informe anticipa que la conmoción por la guerra hará subir el precio promedio del crudo Brent a 100 dólares el barril en 2022, un 40% más con respecto a 2021 y el nivel más alto desde 2013. Para 2023 se estima que rondará los 92 dólares el barril. Por otra parte, se espera que para 2022 los precios del trigo suban más del 40%, y los metales un 16%.

Ayhan Kose, director del Grupo de Perspectivas del Banco Mundial, destacó la magnitud de la crisis de oferta debido a la guerra en Ucrania. «El consiguiente aumento de los precios de los alimentos y la energía está generando un alto costo humano y económico, y probablemente frenará los avances en la reducción de la pobreza. La subida de los precios de los productos básicos exacerba las presiones inflacionarias, ya elevadas en todo el mundo», remarcó.

Los expertos del Banco Mundial instan a los legisladores a tratar de minimizar los efectos de esta situación, y les reclaman que diseñen programas de protección social focalizados, como los de transferencias monetarias y de obras públicas, en lugar de fijar subsidios a los alimentos y los combustibles.

Prácticamente el triple

Cerrando el foco en lo temporal y en lo geográfico, el precio de la electricidad para el Estado español en el mercado mayorista será hoy de 224,97 euros el megavatio hora (MWh), lo que supone una subida del 1,82 %. El precio de la luz prácticamente triplicará los 74,4 euros/MWh que marcaba hace justo un año.

En los 28 días que van de abril, el precio de la electricidad alcanza de media los 190,87 euros/MWh, cerca de un 33% por debajo del valor de marzo, el mes más caro de la historia con 283,3 euros/MWh.

En el caso del gas, su precio se encareció más de un 10% y se pagó 108,8 euros por MWh después de que Rusia cortara el suministro a Polonia y Bulgaria por rechazar el pago en rublos [ver página 19]

En aras a intentar atajar la escalada de precios, los Gobiernos de Madrid y Lisboa acordaron con la Comisión Europea «un acuerdo político» para limitar el impacto del precio del gas en el mercado mayorista, fijándolo en unos 50 euros.

La ministra española para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, confirmó que la compensación a las instalaciones generadoras de electricidad a partir de gas natural se distribuirá entre los consumidores a través de la factura eléctrica.

Aseguró que se trata de un «reaseguro para los consumidores ibéricos», y ha explicado que «habrá que distribuir» el ajuste entre el tope fijado de 50 euros/MWh y su precio real «entre los consumidores de energía».

Durante la interpelación dirigida por el PP en la sesión al Gobierno en el Congreso, indicó que una vez aprobado y en vigor, el acuerdo beneficiará al 40 % de los consumidores domésticos –aquellos que tienen tarifa regulada– y hasta al 80 % de los consumidores industriales de electricidad, cuyas facturas están vinculadas al mercado mayorista de la electricidad.