El Ibex dio ayer otro paso al alza, el quinto consecutivo, para alcanzar sus nuevos máximos anuales de cierre. Las ganancias se impusieron desde la apertura, apoyadas en las subidas de Nueva York, que se tomaba un respiro después del vendaval bajista asociado a los malos datos adelantados por algunas grandes tecnológicas.

Con todo, puede decirse que las noticias de la jornada tuvieron un sesgo negativo. Para empezar, EEUU rebajaba una décima el PIB anualizado del primer trimestre en su segunda lectura. El dato cae hasta el -1,5%, mientras se contrae un 0,4% respecto al último trimestre de 2021. Además, la Fed dejaba presentir el miércoles la gravedad de la situación inflacionaria en las actas de la última reunión al sugerir dos subidas del 0,50% en los tipos de interés en junio y julio. A partir de entonces podrían darse un tiempo antes de adoptar más medidas.

El Ibex acabó la sesión con 8.888,80 puntos, tras sumar un 1,47%. En los últimos cinco días sube un 5,74%, mientras se anota ya un 2% en el ejercicio.

Los bancos mantienen su senda alcista aupados por las expectativas de las subidas de los tipos de interés. Ayer volvieron a destacar dentro del Ibex los títulos de Sabadell (+3,88%), BBVA (+2,29%) y Santander (+2,27%). No obstante, las subidas fueron lideradas por Inditex (+5,15%), catapultado por unas previsiones optimistas sobre sus resultados, a pesar del impacto de la caída del beneficio en Rusia. Iberdrola (-1,14%) fue el peor valor del día.

El resto de plazas europeas también cerró al alza. París ganó un 1,78%, Fráncfort, un 1,59%, Milán, un 1,22%, y Londres, un 0,56%. En Wall Street, una hora y media después del cierre en Europa, el Nasdaq 100 (+3%) encabezaba las subidas.