Trabajadores de Osakidetza se concentraron ayer ante los centros de salud, convocados por Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT, para denunciar el desmantelamiento y la precarización de la Atención Primaria, y exigir que se desbloquee la negociación para dar «solución a los múltiples problemas». Asimismo, anunciaron que las movilizaciones continuarán tras las dos jornadas de huelga convocadas para los días 18 y 19 de mayo «si las cosas no cambian».

Los sindicatos con presencia en la Mesa Sectorial de Sanidad convocaron estas protestas ante los centros de salud bajo el lema “Osakidetza salba dezagun. No al desmantelamiento de la sanidad pública”. En ellas se pudieron escuchar consignas como “Sagardui dimisión”, “Estamos aquí en defensa del empleo” o “Sobran los discursos, más recursos”.

Las concentraciones formaban parte de las movilizaciones previas a las dos jornadas de huelga que hay convocadas en Osakideta los próximos 18 y 19 de mayo y que han llamado a apoyar al conjunto de los trabajadores de salud.

«PROBLEMAS EVIDENTES»

Desde Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT alertaron de los problemas que sufre la Atención Primaria y que son «evidentes tanto para la plantilla como para la propia ciudadanía», que reciber un servicio «cada vez más precario».

Los sindicatos denunciaron «PAC cerrados, restricción de horarios, falta de cobertura de ausencias y jubilaciones, contratación precaria, altas tasas de temporalidad, sobrecarga sistemática de trabajo, PAC abiertos sin personal facultativo, etc...».

Según lamentaron, pese a que en este nivel asistencial ya se secundaron tres jornadas de huelga en 2019, desde entonces, «la situación no ha hecho sino empeorar» ante «la pasividad del Departamento de Salud».

Para los centrales convocantes, «la eventual falta de algunos perfiles profesionales se ha convertido en la excusa perfecta para aplicar medidas que, en otras circunstancias, serían muy difíciles de poner en marcha».

A su entender, teniendo en cuenta el número de personas inscritas en las OPE de Osakidetza, «es evidente que sí hay profesionales para contratar», pero que «las precarias condiciones de trabajo» que se les ofrecen «hace que desarrollen su labor profesional en la sanidad privada o el extranjero».

Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT se mostraron convencidos de que «el inmovilismo y las imposiciones» del Departamento de Salud indican que «la movilización es el camino para conseguir revertir esta situación».

Las seis centrales denunciaron, en este sentido, el bloqueo de la negociación colectiva para solucionar los problemas existentes y lamentaron que la nueva OPE, que calificaron de insuficiente, se haya puesto en marcha sin saber si quienes participaron en la anterior tienen plaza.