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OSASUNA

Oier Sanjurjo, una de las leyendas rojillas, anuncia que cuelga las botas

A través de sendos vídeos en euskara y castellano, el futbolista lizartarra comunicó que abandona la práctica profesional del fútbol, después de jugar una temporada en el AEK Larnaca y haberlo hecho otras trece en el primer equipo osasunista.

Un emocionado Oier durante su despedida multitudinaria en El Sadar.
Un emocionado Oier durante su despedida multitudinaria en El Sadar. (iñigo URIZ | FOKU)

Con 37 años recién cumplidos, Oier Sanjurjo, una de las leyendas osasunistas de los últimos tiempos, ha decidido poner fin a su carrera profesional fútbolistica. Después de nada menos que trece campañas defendiendo la elástica del primer equipo rojillo -hubo de por medio una cesión al Celta en Segunda- y una última en las filas del AEK Larnaca, el jugador lizartarra ha optado por colgar las botas.

El anuncio lo realizó ayer mediante sendos vídeos en euskara y castellano colgados en las redes sociales de la empresa que le representa -Global Ases-, dando las gracias «a este precioso juego y gran deporte». «Y pita final el árbitro, que significa el final de mi carrera como futbolista profesional», se refiere al último encuentro jugado en las filas del cuadro chipriota.

A este último club le agradeció que le hubiera hecho un hueco para «poder participar en esta potente e histórica temporada», en la que Oier ha disputado la Europa League. A él llegó hace casi un año -10 de junio de 2022-, poco después de que se hiciese público que no iba a renovar con Osasuna y tuviese una despedida multitudinaria en El Sadar.

A la entidad rojilla llegó en edad juvenil para ir superando etapas hasta alcanzar el primer equipo. «Especialmente gracias porque me has dado la oportunidad de desarrollar mi trayectoria profesional, junto a mi crecimiento personal y eso es muy valioso», le dedicó al equipo que le vio madurar como futbolista y persona.

Tampoco se olvidó Oier de expresar su agradecimiento en gallego al Celta, Vigo y Galiza «por haber apostado por aquel polivalente jugador». En dicho conjunto recaló en la 2011-12 en calidad de cedido, colaborando en el ascenso a Primera del bloque celeste, donde se descubrió también como excelente central, otra de las posiciones que ha cubierto en determinadas ocasiones que lo han requerido sus técnicos.

ORGULLO E ILUSIÓN

«Hay muchas últimas cosas, último partido, último entrenamiento, último sprint, último contacto con el balón, como pasa en cualquier despedida o final de etapa. Y en esas estoy, gestionando todo eso: satisfacción, nostalgia, descanso, orgullo e ilusión, y alguna cosa más», concluyó una de las recientes leyendas rojillas.

Oier es el sexto futbolista con más partidos oficiales disputados en la historia de Osasuna -356- desde aquel ahora lejano 2008 en el que debutó defendiendo la camiseta del primer equipo rojillo. Como a otros jugadores anteriores, le tocó pasar por un periodo de aprendizaje lejos de Iruñea para volver más reforzado en su madurez como futbolista.

Desde su regreso de Vigo, se convirtió en una pieza indispensable, rondando y superando la treintena de envites disputados cada curso, a excepción de la 2014-15, en la que durante la primera jornada liguera se inerpuso en su camino una rotura del ligamento cruzado. Un grave contratiempo del que el lizartarra, siempre pundonor y coraje, supo salir adelante para convertirse en el estandarte del equipo sobre el césped y en el vestuario, así como uno de los ídolos de la afición rojilla.

Su contribución ayudó a lograr los ascensos de 2017 y 2020, amén de consolidar a la escuadra navarra en la máxima categoría, siendo la extensión de Arrasate en el campo. Solo ya en la campaña pasada comenzó a disminuir su participación ante el empuje de compañeros como Lucas Torró, lo que le impulsó a emprender la aventura chipriota.