Ibai AZPARREN

El pp cierra su campaña en iruñea con el «miura» aznar

El expresidente del Gobierno español José María Aznar intervino en el cierre de campaña del PP para las elecciones europeas que se celebrarán mañana. Lo hizo en Iruñea, donde instó a concentrar el voto de la derecha en el PP, criticó el «populismo» de Pedro Sánchez y subrayó que «Navarra siempre será Navarra. Eso es ser navarro y español».

José María Aznar sonríe cuando le colocan un pañuelo al cuello durante el acto del PP en el Baluarte.
José María Aznar sonríe cuando le colocan un pañuelo al cuello durante el acto del PP en el Baluarte. (Idoia ZABALETA | FOKU)

José María Aznar se pronuncia cuando percibe que el panorama político requiere de su experiencia. Esta vez, el cierre de campaña de las elecciones europeas inspiró al expresidente del PP a obsequiar a los que ayer acudieron al Baluarte con una llamada a la acción: «Concentren el voto de la derecha en el PP, es una obligación moral». Y también «patriótica», agregó, porque, a su juicio, no es solo la Constitución española la que estaría en riesgo, sino la propia continuidad de «España como nación».

Los asistentes, una mezcla de políticos y veteranos propensos a la nostalgia noventera, acogieron entre aplausos a un Aznar presentado por el candidato del PP a las europeas, Antonio López Istúriz, como «el presidente del mejor Gobierno de la historia democrática de España». En términos taurinos, «el miura que atemoriza a la izquierda más jeta y caradura de España».

Entre banderas rojigualdas y europeas, y alguna que otra navarra, Aznar hizo un recorrido por lo que él considera los grandes peligros que acechan a la «nación española». Empezó criticando la amnistía del procés, un preludio de lo que vendrá después: «Una consulta de autodeterminación profundamente inconstitucional». De ahí su llamamiento a filas de noviembre: «El que pueda hablar, que hable; el que pueda hacer, que haga».

CONTRA EL «POPULISMO»

Habló y mucho, sobre todo de Pedro Sánchez y del «populismo incompetente, irresponsable y corrupto» que representa el presidente del Ejecutivo español. «Cuando uno pacta con los separatistas, golpistas y antiguos terroristas, no solamente renuncia a tener un proyecto propio, renuncia a gobernar para la mayoría», expresó.

«Orgulloso» de «llevar sangre navarra», Aznar remarcó que «Navarra ha sido, es y siempre será Navarra. Eso es ser navarro y ser español, porque Navarra no se puede diluir, no puede caer en manos de alguien que quiere diluir España en un conglomerado separatista», recalcó.

El expresidente del Gobierno español evocó un compendio de recuerdos políticos, mientras reflexionaba: «Me han criticado por muchas cosas y elogiado por otras mucas. Pero cuando me recuerdan lo que hice peor, digo que ando mal de memoria». Su declaración deja en suspenso si hacía alusión a controversias pasadas como sus declaraciones sobre la autoría de los atentados del 11M y la existencia de armas de destrucción masiva en Irak, o su participación en el cierre de periódicos.

Respecto a «las cosas buenas», Aznar recordó que fue él y solo él quien unió «a todo lo que estaba a la derecha de la izquierda», y es por esto que pidió concentrar el voto en el PP en los comicios de mañana.

«El voto débil es el voto que no contribuye y que disgrega», señaló el mandatario del PP, para a continuación añadir que, tras los pactos del PSOE «con los separatistas, solamente nos han dejado a nosotros, el PP, para defender el constitucionalismo español. Tenemos que gobernar para todos los españoles, no para radicalizar».

A pesar de las poquísimas expectativas abiertas sobre que saltase alguna sorpresa, tras media hora de críticas, profecías y autoelogios, Aznar cerró su sermón apocalíptico con un vigoroso ‘¡Viva Navarra y viva España!’.