El Pleno de las Juntas Generales de Bizkaia aprobó ayer instar al Consorcio de Transportes a que, en el marco de la actualización del Plan Estratégico del Transporte Público 2018-2028, realice una «prognosis de demanda» a partir de los crecimientos habidos y previstos, las tendencias de movilidad urbana, la integración de otros modos de transporte, escenarios de integración tarifaria, así como otras variables socioeconómicas.

Los resultados que se obtengan del estudio, apunta la iniciativa apoyada por la mayoría de la Cámara, «se tendrán en cuenta» en la toma de decisiones sobre las frecuencias en Metro Bilbao, «atendiendo también a las necesidades de carácter técnico que pudieran ser necesarias».

Tres semanas después de que la diputada general reconociese que es legítimo pedir cambios, tal y como reclaman siete ayuntamientos de Uribe Kosta, la Cámara debatió una moción de EH Bildu al respecto, llegándose a un acuerdo entre los grupos que sustentan el Gobierno foral y la primera fuerza de la oposición, a la que se sumó el PP no sin censurar que se les hubiera apartado en el proceso de negociación, lo que llevó a Elkarrekin Bizkaia a abstenerse.

El juntero de EH Bildu Raúl Méndez consideró que con esta decisión se deja la puerta abierta a que se produzca esa mejora en las frecuencias en la línea 1, especialmente por lo que afecta a las estaciones de Sopela, Urduliz y Plentzia, que aseguró que «conviven con un servicio más propio de cercanías, que de metro». «A mayor oferta, mayor uso», enfatizó.