De regreso de Italia, tras derrotar al Dinamo Sassari, Melwin Pantzar se mentaliza de cara al derbi de mañana al mediodía en Miriblla ante un Saski Baskonia que también firma un balance de 3-6 en la Liga ACB.

¡Enhorabuena por la victoria ante Dinamo Sassari!

La verdad es que hacía falta. Para crecer en confianza y seguir creciendo como equipo, nos vendrá muy bien.

Desde fuera esta segunda fase de la FIBA Europe Cup ya parece tener otro nivel, ¿no?

No diré que la primera fase fuera fácil, pero se nota que esto empieza a ser más serio, sí. Un Sassari o un Cholet -rival de Bilbao Basket- que lidera la Liga Francesa ya suponen otro nivel y hay que prepararse.

¿El aumento de nivel en Europa les ayudará en la ACB?

Pues eso espero. Esos partidos nos tienen que ayudar para crecer, a no relajarnos y a ser mejores también cuando retomemos la ACB, claro.

Ante Dinamo Sassari ganaban por 49-67 y volvieron a verse 86-87. ¿Qué les sucede?

Nos cuesta cerrar los partidos. Pasa que ganar fuera de casa siempre es difícil. Nos pasó en Murcia, en Girona... Esta vez pudimos ganarlo, pero tenemos que seguir entrenando, confiando en el staff técnico y en nosotros.

¿Han merecido ganar más partidos que los que llevan?

Sin duda. Creo que un par de partidos lejos de casa, los podíamos haber ganado, pero para eso hay que aprender a cerrar esos partidos. Fuera de casa el rival te aprieta, no se rinde y a veces dudas. Hay que seguir porque creo que llegarán esas victorias.

¿Tras el partido de Sassari, le motiva el derbi del domingo?

¡Mucho! Y creo que al Baskonia también le motivará. Está bien jugar contra el Dinamo Sassari ¡e imagina para el Baskonia sus partidos de Euroliga! Pero un derbi siempre va a ser especial, para cualquiera de los dos equipos y además, también para nuestros aficionados. Sabemos lo que significa para nuestros seguidores pelear contra un equipo de Euroliga en un derbi. Tenemos que lucharlo para ganar.

Bueno, Saski Baskonia es de Euroliga, pero tiene su mismo 3-6 en la ACB. ¿Por qué?

No sé, porque yo no he jugado nunca la Euroliga, pero sí que puedo decir que, tras la NBA, la ACB es la competición estatal más fuerte que existe. No es solo el Baskonia, el Real Madrid y el Barça también han perdido más partidos de los que nadie pensaría.

¿En la ACB hay jugadores que no juegan en Euroliga, pero tienen «nivel Euroliga»?

Uno tiene mucha motivación contra un rival de la Euroliga, pero no es solo eso. Toda la competición es dura y si juegas contra alguien de BCL, Eurocup... también es muy duro, especialmente fuera.

El año pasado se perdió el derbi de Miribilla por un golpe. ¿Lo pasó mal?

Mucho. Por un lado, porque habían venido mi abuela y mi hermana desde Suecia a verme y luego, por el resultado. Eso sí, el triple ganador de Kullamae lo recuerdo bien. (ríe)

A veces el tiro final no entra o le entra a tu rival, pero cuando es a tu favor, se te queda para siempre. Aunque no juegues, tienes un subidón tremendo que hace que lo vivas y lo recuerdes muy intensamente. Estaba muy nervioso... ¡Y una alegría tremenda!

También Markus Howard se perdió el derbi, y anda flojo.

No podemos fiarnos de un jugador con esa calidad, capaz de hacer 30 puntos con facilidad. Pero además tienen a Moneke, los pívots... En el Baskonia todos son peligrosos.

Con el Baskonia también viene Pablo Laso, quien le hizo debutar en la ACB. ¿Se parece en algo a Jaume Ponsarnau?

¡Sí, me hizo debutar contra el Fuenlabrada! Ese día tampoco se me va a borrar. En cuanto a si se parece a Jaume... Se parece en dos cosas: que es un gran entrenador y que son tipos muy listos. Pero son dos entrenadores diferentes con los que se aprende mucho.

Usted padeció una «Lasina» en un tiempo muerto.

Me acuerdo, sí, y tengo que decir que me sirvió mucho para aprender lo que es la ACB. Pero no me lo tomé a mal. Es más,