La planta de reciclaje Onaindia de Gasteiz, que se incendió el martes por la noche, continuaba ardiendo a cierre de esta edición, y, aunque el fuego está confinado y controlado, se preveía que el material siga ardiendo uno o dos días más. Durante la jornada de ayer, el Ayuntamiento de Gasteiz desactivó la recomendación a la ciudadanía de cerrar ventanas como medida preventiva ante el humo generado, una vez revisados los últimos datos de lectura de partículas en la atmósfera. El aviso llegó a ser conocido en realidad por muy pocas personas dada la hora avanzada en que se emitió.

Con todo, para entonces gran parte de la ciudadanía ya se había visto alertada por la columna de humo o por el olor desprendido que impregnaba la zona.

Los índices en directo de la calidad del aire en Europa recogidos por el proyecto World Air Quality Index mostraban a lo largo de la noche que Gasteiz tenía las peores mediciones de todo el continente.

El pico registrado fue de 183 partículas tóxicas de menos de 2,5 micras por metro cúbico de aire en el medidor de la Avenida de Gasteiz. Quedó registrado en torno a las siete de la mañana. Si bien, no existen evaluaciones en las horas en que el incendio estuvo más activo y emitiendo más gases.

Por la tarde, las mediciones en ese mismo punto habían bajado a «moderadas» (en el entorno de las 50 micropartículas), lo cual encaja dentro de una situación normal en dicho punto de la ciudad.

MEZCLA DE RESIDUOS

El incendio se inició a las 21.15 horas del martes en la calle Artapadura, en una planta de reciclaje de diferentes tipos de residuos, sin que se registraran heridos ni desalojados.

La localización es una zona industrial, y el área residencial más cercana se encuentra radicada al otro lado del río, en Abetxuko, según fuentes municipales.

Las mismas fuentes remarcaron que el viento, que comenzó soplar a media tarde, además del tipo de material incendiado, pudo influir en la rápida propagación de las llamas, que se habrían extendido a un taller que trabaja con neumáticos.

Aproximadamente una hora después de iniciarse el fuego, el techo del pabellón central de la planta de reciclaje colapsó.

La totalidad del parque de bomberos se movilizó para trabajar en «una extinción complicada». Debido al tamaño de las llamas y la «carga de fuego», así como al viento reinante, el humo y cenizas consecuencia de la combustión se dejaron notar en diferentes zonas de la ciudad.

Por ello, el servicio de prevención y extinción de incendios recomendó a la ciudadanía cerrar ventanas y recoger la ropa exterior tendida, recomendación que se retiró a primera hora de ayer.

FORTUITO, SEGÚN EL AYUNTAMIENTO

La alcaldesa de Gasteiz, Maider Etxebarria, y el concejal de Seguridad, César Fernández de Landa, informaron de que los primeros indicios apuntan a que el incendio fue fortuito, aunque habrá una investigación.

El concejal visitó ayer el pabellón y explicó que el fuego estaba «absolutamente controlado», aunque existía «un incendio latente en su interior» debido al tipo de residuos quemados, que proceden de zonas industriales de la ciudad y son maderas, cartones, palets y plásticos de envolver, entre otros. «Onaindia es un gestor autorizado que se encarga de ese tipo de residuos», precisó.

«Hay una potencia bastante grande de residuos y el agua no consigue llegar hasta abajo», por lo que es necesario «ir con tranquilidad», explicó Fernández de Landa, que adelantó que las labores de extinción pueden prolongarse otras veinticuatro horas.

«En este primer momento, parece un incendio fortuito por combustión espontánea de los residuos que hay ahí», señaló el edil del PNV.

Por su parte, el coordinador de Alianza Verde, Juantxo López de Uralde, no se mostró conforme y demandó «una investigación en profundidad» sobre el incendio.

En una nota, subrayó que la proliferación de fuegos en vertederos y plantas de residuos en los últimos años es «excesiva» y agregó que «no parece que exista ninguna razón natural que pueda explicar ese aumento».

«La tragedia de Zaldibar volvió a poner en el foco en el abandono de las políticas de residuos y puso de manifiesto, además, la falta de control en los vertederos y la deficiente gestión de residuos», remarcó la formación al tiempo que criticó que no se toman las medidas necesarias para evitar este tipo de sucesos.