GARA
PARÍS

Georges Abdallah saldrá de la prisión de Lannemezan el 25 de julio

El militante comunista libanés Georges Abdallah saldrá de la cárcel de Lannemezan el 25 de julio, tras la decisión adoptada por el Tribunal de Apelación de París, que ha rechazado un recurso que buscaba mantenerlo en prisión. Abdallah es el preso político que más tiempo lleva encarcelado en Europa. Fue detenido en Lyon en 1984.

Movilización para reclamar la libertad de Georges Abdallah, el lunes en Toulouse.
Movilización para reclamar la libertad de Georges Abdallah, el lunes en Toulouse. (Valentine CHAPUIS | FRANCE PRESSE)

El militante comunista propalestino Georges Abdallah, el preso político que más tiempo lleva encarcelado en Europa, quedará en libertad el 25 de julio, después de haber pasado 40 años en prisión, según decidió ayer el Tribunal de Apelación de París.

Abdallah, de 74 años, nacionalidad libanesa y religión maronita, está preso en la cárcel de Lannemezan, en Occitania, y cumple condena por «complicidad en la muerte de dos diplomáticos». Se trata del agregado militar adjunto de EEUU en el Estado francés, Charles Ray, y de un diplomático israelí, Yaakov Bar-Simantov, muertos en dos atentados en París en 1982.

A pesar de que le ley francesa le permitía pedir la libertad condicional desde 1999, Abdallah ha visto denegadas sistemáticamente todas sus solicitudes. La última de ellas fue en noviembre del año pasado. El Tribunal de Ejecución de Penas ordenó la liberación de Abdallah, pero se suspendió por un recurso de la denominada Fiscalía Nacional Antiterrorista (PNAT).

Este recurso fue rechazado ayer y se confirmó su liberación el 25 de julio con la condición de que abandone el Estado francés y no regrese posteriormente.

Abdallah es el preso que más tiempo lleva encarcelado en el mundo vinculado al conflicto surgido por la ocupación sionista de Palestina y el preso político que lleva más tiempo en la cárcel en Europa. Fue detenido en Lyon en 1984 con un pasaporte argelino falso y acusado inicialmente solo por esta causa, pero posteriormente fue condenado a cadena perpetua en 1986, en un rocambolesco juicio en el que su primer abogado, Jean-Paul Mazurier, resultó ser un agente doble que trabajaba para los servicios secretos franceses.

PRESIÓN DE EEUU E ISRAEL

La presión de EEUU e Israel ha sido determinante para postergar su liberación, que ha sido exigida públicamente por movimientos de izquierda e intelectuales como la premio nobel de literatura Annie Ernaux. En la movilización para denunciar el genocidio palestino que tiene lugar todos los martes en Iruñea, por ejemplo, la demanda de libertad para Abdallah ha estado presente.

En estos años, se ha denunciado que el activista libanés ha sido sometido a la llamada «tortura blanca», un aislamiento extremo en el que se pone en riesgo la salud del preso.

Abdallah se unió en la década de 1970 a grupos militantes propalestinos en Líbano vinculados al FPLP. Fue herido en la invasión israelí de 1978 en el sur de Líbano, donde combatió.

Posteriormente, pasó al Estado francés formando parte de un grupo llamado Facciones Revolucionarias Armadas Libanesas (LARF), que realizó cinco acciones armadas, especialmente contra diplomáticos estadounidenses. Este grupo mantuvo contactos con movimientos armados europeos como Action Directe francesa, Brigate Rosse italianas o la RAF alemana.