Marcel PENA
BILBO

Ayuntamiento y comparsas presentan el plan antiagresiones

Igual que hace un año, el Ayuntamiento y Bilboko Konpartsak presentaron ayer la estrategia municipal «Errespetu Nagusia» contra las agresiones machistas, racistas y LGTBIfóbicas en Aste Nagusia. Para llevarlo adelante, pidieron el compromiso de toda la ciudadanía.

Presentación de la estrategia municipal «Errespetu Nagusia».
Presentación de la estrategia municipal «Errespetu Nagusia». (Marisol RAMIREZ | FOKU)

El Ayuntamiento de Bilbo y Bilboko Konpartsak han reeditado la estrategia municipal contra las agresiones machistas, racistas y LGTBIfóbicas durante Aste Nagusia. Bajo el lema «Errespetu Nagusia», con esta campaña pretenden reafirmar que Bilbo es «una ciudad comprometida y libre de agresiones».

En una rueda de prensa celebrada ayer en el Teatro Arriaga, el alcalde, Juan Mari Aburto, y la representante de Bilboko Konpartsak, Eneritz Enderika, expresaron su rechazo a cualquier tipo de agresión durante las fiestas, mientras que la concejal de Igualdad y Fiestas, Itziar Urtasun, detalló los pormenores del protocolo.

En Aste Nagusia, el Consistorio ofrecerá un servicio de atención y asesoramiento durante las 24 horas para las personas que hayan sido víctimas de algún tipo de agresión. Además, se han vuelto a habilitar los puntos morados en los espacios de conciertos (Abandoibarra y el Parque Europa), la Pérgola del Parque de Doña Casilda y la Plaza Circular, que contarán con personas formadas en materia de agresiones machistas y otro tipo de incidentes de odio.

En el marco de esta campaña, también se han publicado imágenes publicitarias desde principios de agosto en las calles de la capital vizcaina, algo que se intensificará en Aste Nagusia con su difusión en pantallas repartidas por la ciudad, en los escenarios de los conciertos y en las oficinas de turismo, en medios de transporte y estaciones de Bilbobus y de Metro Bilbao.

Por su parte, Aburto hizo un llamamiento para que Bilbo sea «una ciudad comprometida y libre de agresiones machistas, racistas o LGTBIQfóbicas», para lo cual pidió el compromiso de toda la sociedad. En su intervención, el alcalde aludió a la «responsabilidad compartida» para que Aste Nagusia «siga siendo una fiesta única en el mundo». «Debemos concienciarnos cada uno de nosotros sobre estas actitudes y comportamientos. No permitirlos, pararlos, denunciarlos, condenarlos y rechazarlos por muy pequeños o insignificantes que pudieran parecer, porque sólo así no tendrán cabida», reclamó.