Aunque no les guste reconocerlo, lo cierto es que los jugadores, como el resto de aficionados, también realizan sus cábalas sobre antecedentes, estadísticas y puntos. Lo que ocurre es que algunos lo dicen abiertamente, como es el caso de Damià, un futbolista que siempre habla claro y con sentido. Para el futbolista catalán, la horquilla en la que se debe mover Osasuna antes de que finalice la primera vuelta debe estar «entre los 19 y los 21 puntos».

Unas cifras en proyección que, vista la superioridad de los tres de arriba, permitirían obtener un año más la peleada permanencia entre «una buena tropa» que se encuentra «en un puñado de puntos». «Quedan pocos partidos, pero venimos reforzados con la última victoria y parece el momento idóneo para sacar algo positivo», dijo.

En este sentido, subrayó que «estamos creciendo en solidez defensiva y es clave mantener la portería a cero porque, como es obvio, si no encajas, tienes opciones de sumar. Esos puntos te permiten que los rivales directos no sumen y eso es bueno para el objetivo. También está siendo muy importante la cantidad de jugadores en el área del rival a la hora del remate. El míster nos lo pedía y el equipo también está creciendo en esta faceta», admitió.

Ambos aspectos serán claves para darle un buen susto en Mestalla al anfitrión, algo que ya han conseguido otros equipos. «Aunque la clasificación y su actual momento no lo reflejen, es un rival difícil que propone un fútbol ofensivo, pero al que no le están terminando de salir las cosas. Con nuestra propuesta base, adaptada a ellos, les vamos a poner las cosas difíciles», analizó.

Y, como suele ser habitual en Valencia, el entorno, ya crítico de por sí, comienza a pedir cabezas ante su mala situación clasificatoria. Esto podría beneficiar a Osasuna: «Cuando hay movimientos internos que se trasladan a los jugadores, se genera una situación complicada, será una incógnita saber cómo les puede afectar y si el ambiente revuelto será bueno o malo para nosotros».

Damià también tuvo palabras para hablar de su momento personal en clave de autocrítica. «He hablado con el míster sobre que tengo que mejorar determinados aspectos, caso de la salida de balón. En todo caso, físicamente estoy bien y eso me permite estar sólido en defensa y proyectarme más en ataque. Eso también facilita la tarea de los hombres ofensivos», indicó.

Dos horas de entrenamiento

Media hora menos que el miércoles, pero también con mucha intensidad. La sesión matinal de ayer duró por espacio de dos horas, si bien durante todo ese tiempo la plantilla permaneció en los campos de Tajonar, a diferencia del día anterior, en el que hubo sesión de video. Como ya ocurriese en jornadas precedentes, Nino llevó a cabo algunos ejercicios con sus compañeros, síntoma de la buena recuperación del almeriense.

En esta ocasión, Javi Gracia no contó con ninguno de los jóvenes valores de la cantera, ya que, a excepción del mencionado Nino y de Sisi, ya cuenta con todo el plantel al completo. En este sentido, Lotiés se ejercitó por segundo día consecutivo sin que el central francés se resintiese de sus molestias crónicas en la rodilla.

El técnico iruindarra tendrá que hacer un hueco para el casi seguro regreso de Silva y Oriol Riera, por lo que dos jugadores tendrán que salir del once, con las mayores opciones para Puñal y Cejudo.