Maite Soroa
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PAPEREZKO LUPA

Igeldo, la guía Michelin y el Ibaia

Igeldo se convertía en el octogésimo noveno municipio de Gipuzkoa y ayer la caverna reaccionaba como si el Ejército Rojo hubiera cruzado el Bidasoa.

«Abc», bajo una «información» según la cual «La `acumulación de fuerzas soberanistas' que buscan CiU y ERC la ideó también ETA», aseguraba que «Bildu rompe San Sebastián y decreta la soberanía de Igeldo». Tras la lectura de ese titular, servidora llamó alarmada a una amiga donostiarra, que seguía viendo su ciudad igual que hace dos días, y que ya conocía la decisión de la Diputación de Gipuzkoa de respetar el deseo de las y los habitantes de Igeldo, algo que le parece una muestra de buena salud democrática de esa institución. Para «Abc», se trata de un ensayo del «objetivo independentista» de Bildu. Ya podía practicar esos ensayos el Gobierno de Madrid, pero ya sabemos que en cuestiones de democracia anda bastante achacoso. El vetusto diario decía que Martín Garitano «compareció ayer de traje y corbata para anunciar que su Gobierno decretaba la independencia de Igueldo». ¿Demasiado solemne quizá? Después aseguraba que, «Pese a rechazo frontal de la mayoría del Ayuntamiento de San Sebastián y de las Juntas Generales de Guipúzcoa, la coalición radical impone su criterio favorable a la desanexión». ¿A quién impone, a las y los habitantes de Igeldo?

«La Razón» titulaba «Igueldo, la primera secesión», como si fuese el primer (tampoco será el último) pueblo o barrio que se separa de su anterior municipio. Y coincidía en percibir que Bildu «ensaya la independencia y aprueba la separación de este barrio de San Sebastián». En la columna central de la información, aportaba una serie de datos bajo el epígrafe «El proceso separatista»: «Igueldo es un enclave de 10,4 km2, 1.074 habitantes y tres estrellas Michelín, las que tiene el restaurante Akelarre de Pedro Subijana, que dejará de pertenecer a San Sebastián». Igual se exilia. O le quitan las estrellas. Y con infografía propia, el periódico de Marhuenda mostraba un mapa de Donostia en el que aparecían La Concha, el territorio de Igeldo destacado, el centro urbano de «San Sebastián», la AP-8 y, al sur, la «Ría Ibaia». Una siempre había llamado Oria a ese río que, curiosamente, desemboca en Orio, pero leyendo la prensa experta en cosas vascas y separatistas se aprende mucho.