Arnaitz GORRITI
Play-offs de la NBA

Múltiple ración de desempates

Durant, con 36 puntos, barrió a domicilio a Memphis. Indiana y Golden State Warriors también conseguían forzar el empate a tres.

La primera ronda de play offs de la NBA está siendo un canto al baloncesto, y punto. Los que se quejan del espectáculo vacío de la mejor Liga de baloncesto no saben lo que se pierden; más aún, ojalá en el resto del globo se vieran más «espectáculos vacíos» de semejante nivel.

Todo ello a cuenta de que Oklahoma City Thunder -sin prórroga-, Golden State Warriors e Indiana Pacers levantaban un win or go home game y forzaban el desempate. Al final alguno de estos equipos se quedará en el camino, pero su esfuerzo es digno de todo elogio.

MEMPHIS GRIZZLIES (3) -OKLAHOMA CITY THUNDER (3) (84-104). Damas y caballeros, el mejor Durantula con todos ustedes. El alero de Oklahoma, muy criticado por su desacierto y su incapacidad de superar el marcaje de los «ositos» en esta serie, aunque fallara los seis triples que intentó, reventó el sexto partido con 36 puntos y 10 rebotes.

A partir de anotar 14 puntos en el primer cuarto, y con el añadido de los 25 puntos de Russell Westbrook y los 16 de Reggie Jackson, Durant machacó a unos Grizzlies que tendrán que volver a encontrar una solidez que perdieron cuando tenía la serie a punto de caramelo. Incapaces de frenar a las estrellas de Oklahoma, perdieron sus opciones tras perder la batalla por el rebote -39 a 48- y un mal porcentaje en triples -3 de 14 contra 9 de 21- y tiros libres -19 de 28 contra 23 de 25-.

Memphis se vio con 15 puntos de desventaja al descanso, 41-56, y además debió soportar el fantástico tercer cuarto de Westbrook, ya que sumó la mitad de sus puntos en ese tercer asalto, para dejar el duelo sentenciado: 61-82. Huelga decir que esta vez no hubo prórroga ninguna.

ATLANTA HAWKS (3) - INDIANA PACERS (3) (88-95). Una franquicia que quiere ser ganadora tiene que ser capaz de remontar un match ball. Sin ir más lejos, los Miami Heat que conquistaban el anillo en 2012 se vieron con un 2-3 adverso frente a unos Boston Celtics liderados por Rajon Rondo. Y cuando los detractores de los Beach Boys -fuera caretas, más bien los de LeBron James-, se frotaban las manos al ver próximo su fracaso, LeBron emergió a su mejor nivel para voltear aquella eliminatoria y guiar a los suyos al anillo. Paul George, con la ayuda de unos David West y Lance Stephenson providenciales, consiguió levantar la «bola de partido» en la cancha de los Hawks, pese a los 29 puntos del base Jeff Teague, auténtico tapado de la peleona franquicia de Georgia.

Atlanta disfrutaba de muy cortas rentas, pero que administraba admirablemente para la desesperación de los Pacers -y de Larry Bird, jefe de operaciones de Indiana y uno de los mejores ejecutivos de la NBA-. David West, cuando parecía que los de Indianápolis estaban a punto de caer, dio un paso adelante y sumó 12 de sus 24 puntos, logrando una remontada que, si consiguen consolidarla en el duelo de desempate, puede dar alas a una franquicia que ya ha dejado de ser un outsider pero que no termina de dar el paso necesario para volverse en un contender con cara y ojos, consciente de que solo ganará si vuelve a hacer las cosas bien, y que en los play off nadie regala nada, por mucho que hayas sido el mejor en la Liga Regular.

GOLDEN STATE WARRIORS (3)- LOS ANGELES CLIPPERS (3) (100-99). La motivación extra del affaire Sterling y conseguir frenar en seco a Stephen Curry -que solo lanzó 10 veces y perdió 8 balones en el quinto partido-, daba la iniciativa a los Clippers, que sin embargo deberán volver a su cancha si quiere finiquitar una serie que, una vez más, terminaba igualado tras u último paso por Oakland.

En esta ocasión, Curry volvió a sus números de lanzamiento -24 tiros de campo para 24 puntos, aunque con el lunar de un 4 de 7 en tiros libres-, y además estuvo bien acompañado por sus compañeros, capaces de aguantar el festival de faltas y contactos propuesto por los angelinos, que acabaron pagando con las expulsiones de Griffin y JJ Reddick por seis personales. A pesar del apretado resultado final un «tres más uno» de Iguodala en los compases finales certificaba el empate. Mientras, los Clippers también echaron de menos la versión de un Chris Paul errático y opacado.

«Es el todo o nada. Es toda nuestra temporada en una línea. Son muchas cosas en una línea. Iremos a la batalla el uno contra el otro. Iremos a la batalla por el entrenador», comentaba tras este duelo el alero de los Warriors Draymond Green. El jugador de la franquicia de Oakland consiguió 14 puntos y 14 rebotes, siendo su cuarto doble-doble en unos play offs.

Donald Sterling tiene cáncer de próstata

El tema de Donald Sterling es un poco cada vez más surrealista. Después de su expulsión por parte del comisionado de la NBA Adam Silver, se conocía que el todavía dueño de los Clippers está luchando contra un cáncer de próstata desde hace tiempo.

El «New York Post» adelantaba la noticia que confirmaba la web de la cadena ESPN durante la retransimisión del sexto encuentro de la eliminatoria entre los Clippers y los Golden State Warriors.

«Si esta noticia es cierta, que sepa que rezaré por él», declaraba un muy afectado Blake Griffin a preguntas de los periodistas. Uno de los jugadores más beligerantes contra su dueño tras las declaraciones de corte racista de este mostraba una faz mucho más solidaria con el anciano octogenario y afirmaba que «nadie se merece una cosa así».

Su entrenador, Glenn «Dic» Rivers se mostró simplemente pasmado. «Espero que no sea cierto», declaraba.

Naturalmente, la noticia de la enfermedad de Donald Sterling nada cambia respecto a su proceso de expulsión de la NBA. GARA