Mikel INSAUSTI DONOSTIA

El monstruo «Godzilla» sigue dando mucha guerra en su 60 Aniversario

Hollywood dice haber aprendido la lección, para no cometer los mismos errores de la anterior versión realizada por Roland Emmerich, y que tanto disgustó a los amantes del cine japonés y del género kaiju. El inglés Gareth Edwards ha querido ser respetuoso con el original de 1954 realizado por Ishirô Honda, y que aquí conocimos como «Japón bajo el terror del monstruo». No podía ser de otra forma, cuando la película está dedicada a la celebración del 60 Aniversario.

En 1998 el tremendista Roland Emmerich hizo un «Godzilla» que sacó de sus casillas a los amantes del fantástico japonés y, en especial, a los conocedores del género kaiju, o películas de monstruos. No es de extrañar, por tanto, que Hollywood haya tardado 16 años en hacer una nueva versión, y esta vez para celebrar el 60 Aniversario del nacimiento del daikaiju o monstruo de gran tamaño por excelencia.

La primera aparición estelar de Godzilla fue en 1954, dentro de la película «Gojira» de Ishirô Honda, distribuida como «Japón bajo el terror del monstruo». La versión del 2014 rinde un cumplido homenaje a la productora Toho del original, con la presencia de Akira Takarada, todo un veterano de la franquicia nipona. La evocación del origen ha sido muy cuidada técnimante, por lo que se han empleado lentes de la época en las cámaras digitales.

El posterior desarrollo argumental conduce a la necesaria actualización y universilización del área de actuación del monstruo, que acabará atacando Nueva York, con tal de no ser menos que King Kong. Sin embargo, el concepto catastrofista sigue siendo muy japonés. Como quiera que Godzilla es un monstruo radioactivo, las referencias al reciente desastre nuclear de Fukushima no se hacen esperar. También está muy presente el tsunami del 2011, cuando el daikaiju provoca un auténtico maremoto, equiparando así su capacidad de destrucción a la de las catástrofes naturales. No deja de ser una fuerza de la naturaleza incontrolada.

Para entender las consecuencias devastadoras de su paso por cada lugar en el que hace un terrorífico acto de presencia, ha sido construido a una escala mastodóntica. Alcanza los 110 metros de alto, lo que le sitúa muy por encima de todo lo visto hasta la fecha.

En el avance llama atención la escena en la que el ejército utiliza unas bengalas para señalar su posición, lo que nos permite descubrir las inmensas proporciones de su diseño. Hasta entonces, al parecer es mostrado de forma parcial o ensombrecida, dando sólo una idea aproximada de sus verdaderas dimensiones.

Frente a una estrella de semejante tamaño poco pintan los personajes humanos, pero el inglés Gareth Edwards, descubierto con su ópera prima independiente «Monsters», intenta que lleven la parte dramática. Por eso el reparto incluye a David Strathairn, Juliette Binoche o Ken Watanabe, Elizabeth Olsen o Bryan Cranston.