OLYMPIACOS - LABORAL KUTXA

Después del estreno victorioso en la Euroliga frente al Neptunas Klaipeda -quien, por cierto, ayer superaba al Estrella Roja de Belgrado por 83-81-, Laboral Kutxa Baskonia tiene un reto de verdadero calado en su visita al puerto de el Pireo para vérselas ante Olympiacos. La escuadra gasteiztarra sigue en permanente estado de reajuste, y en esas andará esta tarde también, toda vez que Lamont Hamilton se incorpora a la convocatoria de Marco Crespi, dejando en tierra a Ilimane Diop.

Lamont Hamilton comentaba antes de partir hacia tierras helenas que «me encuentro mucho mejor. Ya no me preocupan temas como el de mi peso sino el de poder ayudar a mis compañeros en la cancha». Y es que entre su fascitis y un exceso de peso, el de Brooklyn ha estado bien cerca de abandonar la disciplina baskonista este verano, y solamente pudo disputar unos pocos minutos en la Supercopa, con resultados muy mejorables.

«El equipo trabaja duro cada día. Mis compañeros y yo nos estamos preparando para hacerlo cada vez mejor», declaraba el pívot neoyorquino. Buena falta le hará, sobre todo viendo que enfrente estará el campeón de la Euroliga de 2012 y 2013, con Spanoulis al frente.

«Deberemos trabajar a destajo, cierto, pero vamos a tener la oportunidad de ganar a Olympiacos, aunque sea uno de los mejores de Europa. Queremos jugar bien y ganarles, sin excusas», recalcaba Fabien Causeur.

Ante todo «ser serios»

La «seriedad» se ha convertido en el lema predilecto de Marco Crespi en las últimas semanas. En aras de esa seriedad, el técnico varesino «revolucionó» su rotacion en Andorra, y por ese camino quiere ir también hoy.

«Una de las claves para plantar cara será ser serios en defensa. Más que las reglas técnicas, lo importante es la actitud de los jugadores. Para defender no hace falta adaptarse, se habla de ser o no ser serio», remachaba.