I. SALGADO-A. AGIRREZABAL

Jone Libre pone la semilla para crear un «paraguas de libertad» en Euskal Herria

Los miembros de la dinámica «Jone Libre» agradecieron ayer el apoyo recibido de la ciudadanía vasca durante el pasado fin de semana, y anunciaron que la detención de Jone Amezaga no impedirá que los paraguas naranjas se extiendan por los siete herrrialdes. «De nuestra semilla florecerán miles de paraguas, convertiremos el cielo de Euskal Herria en el paraguas de la libertad», señalaron tras censurar la actuación de la Ertzaintza en el mercado de Gernika.

La Ertzaintza irrumpió el lunes en el mercado de Gernika para detener a Jone Amezaga, una joven condenada a un año y medio de prisión por colocar una pancarta. Un hecho que, a juicio de la Audiencia Nacional, constituye un delito de «enaltecimiento del terrorismo». Su arresto supuso un duro golpe para sus vecinos, que durante el último fin de semana convirtieron la villa en un «pueblo libre». Gracias al trabajo de la dinámica «Jone Libre», cientos de personas echaron mano de sus paraguas para crear un caparazón protector, que, tal como anunciaron ayer, en los próximos meses crecerá para dar cobijo a personas imputadas en juicios políticos.

«De nuestra semilla florecerán miles de paraguas naranjas, convertiremos el cielo de Euskal Herria en el paraguas de la libertad, y bajo él estará Jone, a nuestro lado, como otras muchas personas», destacó Lide Totorikaguena, que compareció ante los medios en representación de «Jone Libre». Flanqueada por la madre de Jone, Itziar Amezaga, y por la anciana que resultó herida en la actuación policial, Julia Lanas, la joven recordo los pormenores de la respuesta a la condena, fruto de un «montaje policial». «Tras conocer la noticia -el 26 de noviembre- convocamos una asamblea, y conseguimos llenar el primer piso del edificio Astra. Estábamos sorprendidos y teníamos miedo porque querían detener a nuestra amiga, a nuestra vecina. ¡La querían encarcelar pese a no ser culpable!», manifestó.

Asimismo, puso en valor el papel de la ciudadanía, que el pasado fin de semana llenó de paraguas naranjas las calles de Gernika. Según explicó, los congregados crearon un «paraguas contra la injusticia y, junto a Jone, demostraron que es posible construir un pueblo libre frente a los juicios políticos. [...] Si hemos conseguido crear un pueblo libre ha sido gracias a la implicación de las personas y de los colectivos. Todos habéis hecho posible un fin de semana naranja, todos habéis hecho posible un pueblo libre».

Itziar Amezaga también puso en valor esta idea, ya que a su parecer Euskal Herria no avanzará con ponencias parlamentarias, «ni enseñando a las nuevas promociones de Arkaute cómo golpear a la gente. Este pueblo será libre gracias al trabajo de la ciudadanía». En el caso de Jone, el trabajo de los vecinos ha servido para lograr que, durante un fin de semana, sintiera el apoyo de sus allegados y pudiera vivir el libertad. Un derecho que le fue arrebatado hace 48 horas, cuando la Policía autonómica se la llevó en volandas. «Se la llevaron siguiendo las órdenes de Beltrán de Heredia. Y pagaron su tributo a la Audiencia Nacional», denunció tras recordar los «golpes y empujones» que propinaron los agentes a las personas que trataban de defender a su hija.

Actuación de la Ertzaintza

Julia Lanas resultó herida como consecuencia de la actuación policial. Esta anciana de 94 años se rompió la muñeca y sufrió una fuerte abrasión en la pierna al ser derribada por los efectivos de la Brigada Móvil, que actuaron para apoyar a unos agentes de paisano sin identificar. «No he vivido nunca momentos como los de ayer, estoy viva gracias a que un hombre me ayudo», afirmó. En la entrevista publicada en la página anterior, explica como un chico «se puso encima protegiendo mi cuerpo y el ertzaina vino a darle. Después, el ertzaina vio un charco de sangre y se marchó. El chico se arriesgó, le podían haber abierto la cabeza».

A este respecto, EH Bildu denunció ayer el «grado de violencia» ejercido por la Ertzaintza en Gernika. El parlamentario soberanista Julen Arzuaga, que estuvo presente en la detención de Amezaga, señaló que «fue un sinsentido fuera de lugar que los agentes entrarán a golpes en el mercado, en un recinto atestado de personas, cargando e hiriendo a la gente que estaba allí. Yo mismo les pedí explicaciones por las armas que estaban empleando y lo que hicieron fue tirarme al suelo».

El parlamentario ha presentado una solicitud de información y varias preguntas a al consejera de Seguridad para que aclare si la normativa interna de la Ertzaintza permite el uso de porras extensibles y de otros dispositivos de tipo kubotan o pistolas eléctricas, láser y de electroshock. Además, pide explicaciones sobre los mecanismos de control de la Ertzaintza para garantizar que nadie hace uso de material no homologado, e insta a Seguridad a que remita un informe sobre las características de las porras extensibles.