Jon ORMAZABAL
Alavés Goleada al Zaragoza en Mendizorrotza

El Glorioso suelta lastre

Los albiazules se instalan en la zona templada de la clasificación tras arrollar a un rival que llegaba en su mejor momento en el mejor partido de la temporada. Sin perder rigor atrás, la apuesta ofensiva de Alberto en el once destapó el mejor juego de ataque alavesista.

DEPORTIVO ALAVÉS 4

ZARAGOZA 0

Después de varias semanas apuntalando la zona defensiva, no pudo escoger el Glorioso una mejor forma y momento para asentarse en la zona templada de la tabla y soltar el lastre de equipo romo que arrastraba. En lo que se preveía un partido de pocas oportunidades debido a las rachas defensivas de ambos equipos -tres y cinco partidos respectivamente sin encajar ningún tanto- obligado por las bajas o en una apuesta por el talento, Alberto López puso en liza un equipo de «peloteros» que barrió a un rival al que el público de Mendizorrotza siempre ha tenido especiales ganas.

La propuesta de dejar a Toribio como escoba en un 1-4-1-4-1 y dotar de gran libertad al resto de la medular se antojaba arriesgada ante un rival de pedigrí y enrachado, pero el control del centro del campo fue albiazul desde el comienzo.

Manu Barreiro, otras de las grandes novedades en la punta de ataque apenas necesitó tres minutos para dar el primer susto al portero del Zaragoza y tras otro aviso por parte de Juanma de cabeza, Toti aprovechó un gran servicio de Lanza desde la derecha para poner en merecida ventaja a los suyos en el 23.

Sin ideas

Trató de responder el equipo de Popovic, pero su arreón apenas le sirvió para acaparar algo más de posesión de balón, ya que jugadores importantes como Ruiz de Galarreta apenas entraron en juego y su producción de tres cuartos de cancha hacia adelante fue muy pobre.

Con el campo bastante pesado, acusó el Alavés el despliegue de los primeros minutos, con un Rafa García omnipresente, pero aguantaron el resultado hasta el descanso. No pudo resultar más productiva la reanudación, ya que, a los 25 segundos, Toti devolvió la asistencia de Lanzarote en la primera mitad y el habilidoso extremo catalán hizo el segundo en una especie de pase a las redes, batiendo por bajo a Bono.

Tras tantas semanas de contención, los albiazules no desaprovecharon el viento a favor y se evitaron posibles disgustos siete minutos después con otra internada de Toti desde la izquierda que Manu Barreiro remató a puerta entre dos centrales aragoneses.

Pudo ser mayor el desaguisado para un equipo aragonés al que se le acumularon las desgracias en forma de expulsión de Rico por una dura entrada al recién incorporado Sangalli o la lesión del portero Bono que obligó a su entrenador a agotar los cambios, pero tampoco el Alavés quiso hacer demasiada sangre, entre que Jarosik se resbaló cuando solo tenía que empujar un balón en línea de gol y que Alberto aprovechó la oportunidad para volver a dar minutos a Sergio Llamas.

Eso sí, la salida del gasteiztarra resultó clave a la hora de cerrar la goleada, pues suyo fue el robo y la asistencia con la que Toti redondeó una tarde perfecta. Ahora toca dar continuidad a la velocidad de crucero tomada.