PORRIÑO 27

BERA BERA 28

Bera Bera ganó con muchísimos apuros al Porriño en un partido que se le hizo largo, quizá arrastrando todavía el desgaste -el físico y el sicológico- de una Copa que ha pasado factura, y no solo a las donostiarras. El Rocasa caía derrotado en Alcobendas (26-22), dejando el liderato en solitario para Bera Bera, y también el At. Guardés sufrió hasta el último segundo en Elche (26-28).

El Porriño salió muy fuerte y para el cuarto de hora tenía una ventaja de cuatro goles que obligaba a Aitor Etxaburu a parar el tiempo. Otro partido cuesta arriba desde el principio podía afectar a la moral donostiarra, pero el equipo reaccionó y en el segundo cuarto de hora le devolvió el parcial al Porriño (3-8), lo que le permitía marcharse por delante al descanso.

En la reanudación quien salía con más fuerza era Bera Bera, que conseguía una ventaja de cuatro goles en los primeros minutos que le servían para encarar la segunda mitad con más tranquilidad. El Porriño intentaba recortar sin conseguirlo, hasta que Abel Estévez pedía tiempo a 12 minutos del final y con 21-25 en el marcador. El Porriño arriesgaba con una defensa más abierta y, aunque fallaba su primer ataque y Bera Bera lograba su mayor ventaja tras el gol de Núñez (21-26), la presión defensiva gallega cortocircuitaba el ataque donostiarra y un parcial de 3-0 devolvía la emoción al marcador (24-26). Entonces era Etxaburu quien paraba el reloj, y a la vuelta Bera Bera aumentaba su ventaja (25-28). Estévez pedía su último tiempo con poco más de tres minutos por jugar, el Porriño marcaba el 26-28 y Etxaburu, como si se tratara de un partido de baloncesto, volvía a pedir tiempo a 1.17 del final. Bera Bera no podía aprovechar su ataque y el Porriño, por medio de Samartín, hacía el 27-28, pero sin tiempo ya para más.