Juan Carlos ELORZA
BALONMANO División de Honor femenina

Goleada para pasar página

Bera Bera repitió los 37 goles contra el Castelldefels, en un partido con sustos para Zugarrondo y Elorza.

BERA BERA 37

CASTELLDEFELS 23

No es el momento de sacar conclusiones, ni el Castelldefels un rival que permita extraerlas, pero ayer sí se pudo vislumbrar una novedad en el juego de Bera Bera respecto a lo visto hasta ahora, la intención de correr cada vez que recupera el balón, pero no solo en primera oleada, con pases directos a la finalizadora, sino también en segunda oleada, con varios pases y varias jugadoras, tratando de pillar desorganizada a la defensa rival.

Y en el ataque posicional se incidió en un juego menos «táctico», tratando de explotar la velocidad en los pases llevando las progresiones de la primera línea hasta el límite para acabar en penetraciones o en los extremos. Era una declaración de intenciones, con Montse Puche en el palco siguiendo atentamente las evoluciones del equipo.

Con ese planteamiento Bera Bera salió como un vendaval desde el 3-0 inicial, frenado en seco a los cuatro minutos cuando chocaron las cabezas de las dos jugadoras más grandes de ambos equipos, en un intento de robo de un pase de Manaut que acabó en golpazo con Elorza. La catalana, con una marca en el pómulo, volvió tras diez minutos en el banquillo, pero la gasteiztarra, con un corte en la nariz -el año pasado por estas fechas sufrió una fractura nasal- ya no volvió a jugar..

Bera Bera no acusó la ausencia de Elorza en defensa porque el Castelldefels carecía de punch en su primera línea en ausencia de Manaut, y jugando a la máxima velocidad posible con poco coste en pérdidas de balón la ventaja se disparó enseguida. Cuando Manaut volvió a la pista su equipo ya perdía por 8 goles (13-5), y hasta el descanso Bera Bera no paró de desfogarse, con especial protagonismo de sus extremos Etxeberria y Ziarsolo.

En la segunda mitad Tati Garmendia dio muchos minutos a jugadoras como Arizaga, Ederra y Ezkurdia, mientras la entrada de Lladró aportaba algo más en la portería catalana. También Temprano dejaba su puesto a Zugarrondo en el minuto 13, pero la portera navarra apenas pudo estar diez minutos en pista, porque una mala caída al tratar de parar un remate del extremo la dejó tendida en el suelo con gestos de dolor, y tuvo que retirarse con lo que podría ser una subluxación de su hombro derecho, a la espera de las pruebas a que será sometida, aunque a última hora desde el club informaban que ni Zugarrondo ni Elorza tienen nada grave.