La noticia del trágico accidente ocurrido la noche del pasado lunes en una zona remota al noroeste de Argentina y que se saldó con la muerte de diez personas que participaban en el concurso de supervivencia de TF1 «Dropped» ha convulsionado a la opinión pública y los estamentos políticos del Estado francés, cuyo presidente, François Hollande, expresó a través de un comunicado oficial «su estupor y conmoción» ante esta noticia que se conoció en la madrugada de ayer.

«La desaparición brutal de nuestros compatriotas significa una inmensa tristeza», expresó Hollande en esta nota en la que mostraba sus condolencias a los familiares de los ocho ciudadanos del Estado francés que fallecieron en el accidente sufrido por dos helicópteros, cuyos pilotos, de nacionalidad argentina, también murieron como consecuencia del impacto de sus aeronaves.

Otro aspecto que ha sido destacado en esta tragedia es la presencia entre los fallecidos de tres deportistas de élite -la navegante Florence Arthaud, la nadadora Camille Muffat y el boxeador Alexis Vastine, los dos últimos medallistas olímpicos-. Por su parte, la productora del reality, ALP, reveló a través de una nota sentirse «devastada» por el accidente. «La filmación ha sido interrumpida y los equipos serán repatriados al Estado francés», precisó la productora.

Por su parte, el grupo TF1 también dio a conocer su «inmensa tristeza», precisando que su presidente, Nonce Paolini y todos los equipos de TF1 «se unen en estos terribles momentos al dolor de las familias y allegados». Más allá de la propia evidencia de esta tragedia y la inclusión entre los diez fallecidos de tres deportistas de élite del Estado francés, prevalece una cuestión que podría derivar hacia derroteros lindantes a los límites que debería tener el medio televisivo y los llamados «programas de supervivencia» que tanto auge han obtenido en los últimos años.

«Dropped», el reality de supervivencia en el que participaban los fallecidos, es la apuesta de la productora ALP, la cual elaboró hace dos años el reality de supervivencia «Koh-Lanta», también para TF1. Un espacio cuyo desarrollo tuvo que ser suspendido tras la muerte en pleno rodaje de uno de sus candidatos, Gérald Babin. Este episodio dramático levantó cierta polvareda tras ser anunciado que el programa retornaba a la pequeña pantalla el pasado otoño.