Greg Van Avermaet logró la victoria y el maillot azul de líder en la segunda etapa de la Tirreno Adriático en el espectacular final de Arezzo. La parte final presentaba un circuito al que se daban cinco vueltas con una subida final de 900 metros en la que se impuso el flamenco en un trazado ideal para Sagan.

El de Tinkoff alargó así su racha de casi nueve meses sin ganar. No levanta los brazos desde la tercera etapa de la Vuelta a Suiza del 16 de junio y el campeonato eslovaco de fondo en ruta. Desde entonces acumula infinidad de buenos puestos, pero sin lograr ninguna victoria.

Ayer sabía que además de la etapa tenía como premio el liderato y todo Tinkoff se colocó por delante del pelotón para brindarle esta oportunidad al eslovaco. Sin embargo, se precipitaron en su trabajo para anular la escapada del día formada por Boem (Bardiani), Wyss (BMC), Quintero (Colombia), Haga (Giant Alpecin) y Flens (Lotto NL Jumbo) sin esperar de la ayuda de los demás. Tras acabar Basso, Bodnar se quedó solo con Sagan cuando faltaban más de seis kilómetros para el final.

Solo en los últimos compases apareció BMC en la cabeza del pelotón para preparar la llegada de Van Avermaet mientras Sagan se quedaba encerrado sin margen para remontar al flamenco en los últimos metros.

La carrera entra hoy en un fin de semana de mucha dureza, con dos etapas largas y con alta montaña. La de hoy tiene 218 kilómetros y cuatro puertos de entidad y mañana espera un final muy duro en Terminillo con 16 kilómetros al 7,3% de pendiente media.