Por 114-95, los Golden State Warriors no tuvieron ningún problema para barrer de la pista a los Atlanta Hawks en el encuentro entre líderes que se vivió en la última jornada de la NBA.

El alero Harrison Barnes logró 25 tantos -supliendo a la perfección la baja de Klay Thompson- y encabezó el equilibrado ataque de los pupilos de Seve Kerr en lo que fue su tercera victoria consecutiva, que los sitúa en la cabeza de la NBA con un balance de 54-13, por el 53-15 que firma la franquicia de Georgia, líder del Este.

«Ellos nos barrieron en Atlanta y por eso queríamos vencerlos», declaraba tras el partido un feliz Stephen Curry, que delegó la anotación en sus compañeros, pero que aun así firmó 16 tantos y 12 asistencias.

Por su parte, los Cleveland Cavaliers aprovecharon la derrota de Atlanta para arrimarse un poquito, ya que la franquicia de Ohio superaba por 117-92 a los Brooklyn Nets, con 17 puntos de Mozgov y JR Smith. Los Cavs -que llevan un balance de 44-26- sumaron el decimocuarto triunfo consecutivo en su cancha y se mantienen líderes en la División Central y en mejora continua.

Mientras, los Toronto Raptors consolidan su liderazgo en la División Atlántica -y la tercera posición de la Conferencia Este, con un balance de 41-27-, después de batir por 105-100 a los Minnesota Timberwolves, con 21 puntos de DeRozan y 15 puntos y 15 rebotes de Jonas Valanciunas.

Oklahoma resiste

En lo que a los equipos del Oeste se refiere, Oklahoma City Thunder, pese a la lesión de Ibaka -el hispano-congoleño estará ausente entre 4 y 6 semanas tras operarse de la rodilla- recuperaban la octava paza del Oeste al superar por 122-118 a los Boston Celtics.

San Antonio Spurs superaba a los Milwaukee Bucks por 103-114, el día en que Tim Duncan anotaba su canasta en juego número 10.000.