El joven nepalí de 15 años Pemba Lama se encontraba trabajando en una casa de huéspedes en la zona de Gongabu cuando el edificio de siete plantas se vino abajo a consecuencia del seísmo, el peor que ha sacudido el país asiático en 81 años, según ha indicado el superintendente de Policía Narayan Khadka.
Los equipos de rescate le localizaron anoche y pudieron comunicarse con él.
Tras ser desenterrado después de permanecer 120 horas bajo los escombros, Lama ha sido trasladado a un hospital.
En los últimos días se ha encontrado con vida a varias personas de entre las ruinas del seísmo.
El número de muertos por el seísmo alcanza casi los 5.500, además de 11.000 heridos, según el último recuento ofrecido esta mañana por el Ministerio de Interior.