«Estoy muy feliz por lo conseguido, pero ahora no podemos volvernos locos. Somos Osasuna y nuestro sitio está entre los diez últimos de Primera División y los diez primeros de Segunda. Si queremos disfrutar de esto no podemos volvernos locos, tenemos que interiorizar y aprender de errores del pasado», ha dicho.

Martín ha admitido que es feliz «tal y como» actúa. «Llegué el año pasado en una situación muy crítica y ahora mismo estoy tocando el cielo con las manos. Esto de hoy ha sido algo maravilloso y muy emotivo para mí, se lo quiero dedicar a mi padre que falleció este año», ha comentado.

Martín ha apuntado que «la madurez» de su equipo ha resultado clave para poder superar los momentos complicados del partido y también para sobreponerse en todo momento: «Estoy muy orgulloso».

Después de la expulsión, el técnico ha confesado que se había encerrado en el vestuario. «He llorado solo y cuando me han dicho que ya estaba, me he roto un poco más», ha dicho.

Sobre uno de los protagonistas de la eliminatoria, el joven Kenan Kodro, autor de dos de los tres goles de su equipo, Martín ha comentado que se ha adaptado a la posición que le propuso. «Estoy seguro que será un jugador muy interesante en un futuro muy cercano», ha indicado.