El candidato a lehendakari del PP volvió a echar mano ayer del supuesto fraude en el cobro de las ayudas sociales para tratar de ganar un puñado de votos. El líder de la formación unionista recuperó el mensaje lanzado un par de años atrás por Javier Maroto e insistió en que su partido «va a llevar la voz de la calle al Parlamento y modificaremos la Renta de Garantía de Ingresos».

«Hay que hablar de justicia social, de un sistema que no funciona y encadena a la gente al cobro de una ayuda que le cierra las puertas del trabajo, de la integración y del empleo», añadió Alfonso Alonso, quien señaló que la CAV «no es un paraíso de la justicia social, porque la solidaridad no se distribuye igual para todos. Y esto está produciendo una brecha social».

Alonso, que participó junto a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, en un acto electoral celebrado en Gasteiz, recordó que su partido ya presentó la pasada legislatura una iniciativa para limitar el acceso a las ayudas sociales en la CAV, «pero nadie nos hizo caso». Cabe recordar que después de que la Cámara autonómica diera carpetazo a la ILP presentada por la plataforma Ayudas+Justas, la parlamentaria Laura Garrido presentó una fallida proposición de ley en la que proponía dejar fuera de la RGI a los inmigrantes en situación irregular. Además, apostaba por aumentar a cinco años el periodo mínimo de empadronamiento para poder optar a las ayudas sociales y defendía dejar sin RGI a quienes tuvieran antecedentes por «pertenencia a organizaciones terroristas», por delitos de «homicidio, lesiones o maltrato», así como por delitos «contra la libertad sexual, contra el patrimonio y contra la salud pública». El PP no incluyó en la lista otros delitos, como los relacionados con la corrupción o el fraude fiscal.

La propuesta de Garrido tambien incluía la prohibición de enviar fuera de la CAV el dinero de la RGI, y proponía «establecer un subsidio económico complementario a la renta básica par la inclusión y protección social para pensionistas que por circunstancias personales no puedan hacer frente a facturas energéticas, como gas o electricidad». Una medida con una clarar intencionalidad electoral.

Ahora Alonso recupera estas ideas de cara a los comicios del 25S, y vuelve a utilizar el lema «Ayudas sí, fraude no», empleado por Maroto en la campaña de las elecciones locales y forales. «La campaña electoral quita las caretas, pero nosotros vamos a ser coherentes y vamos a seguir defendiendo lo que hemos defendido: la verdad. Y la vamos a llevar al Parlamento», destacó el presidente del PP de la CAV, que ayer afirmó que «el voto al PP es un voto a favor del sí, para desbloquear el Gobierno de España». «Les pido que vuelvan a ir a la urna, con toda la fuerza. Apretemos a los que tengamos que apretar, a Pedro Sánchez o al PNV», manifestó.

Un «muro de contención»

Por su parte, Cospedal pidió a sus votantes que no se queden en casa el 25S, «porque como no esté el PP en una posición de fortaleza en el Parlamento Vasco, no habrá ni un muro de contención al nacionalismo».

Se refirió igualmente a los jeltzales al afirmar que «hay algunos que, con tal de estar en el poder, les da igual con Podemos, con Bildu o con quien sea». «Pero que no se engañe nadie. Los únicos que defendemos a la inmensa mayoría de los vascos, y la inmensa mayoría de los vascos se sienten españoles, como nosotros, es el PP», subrayó.

Las diferentes encuestas publicadas hasta la fecha sitúan al PP en quinta posición, cerca del PSE, partido al que acusó de «dejarse llevar por los postulados nacionalistas».

En cuanto a su candidato, Cospedal señaló que Alonso es la persona «mejor preparada para poder dirigir el destino del País Vasco». «Necesitamos a un lehendakari con las cualidades de Alfonso Alonso», remarcó.

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«Hay que hablar de justicia social, de un sistema que no funciona y encadena a la gente al cobro de una ayuda que le cierre las puertas a la integración»

Alfonso ALONSO

Candidato a lehendakari