En la presentación de su candidatura y de su programa ante el Claustro, Eva Ferreira ha felicitado a toda la comunidad universitaria por haber demostrado «inteligencia», resiliencia y capacidad de adaptación a la incertidumbre, para continuar con la docencia a pesar de la pandemia y que sus centros sean «lugares seguros» frente al coronavirus, por lo que quienes forman parte de la UPV/EHU pueden «caminar con la cabeza muy alta».

Además, ha presentado a su futuro equipo rectoral entre quienes ha situado a Quindós, director del Departamento de Inmunología, Microbiología y Parasitología que en los últimos meses ha tenido una labor divulgadora destacada en los medios en lo referente a la covid-19 y que ocupará el cargo de vicerrector de Desarrollo Científico Social y Transferencia.

En el ámbito de la formación, Ferreira se ha comprometido con el «reto» de incrementar titulaciones con mención internacional y las metodologías docentes innovadoras, e impulsar la formación en competencias transversales como la creatividad, la formación en idiomas, el emprendimiento y la capacidad de liderazgo. Asimismo, aumentará, ha dicho, la docencia en euskara a nivel de grado y postgrado.

Respecto al ámbito laboral, ha planteado la importancia de aportar estabilidad a la plantilla y que haya proyección profesional que sea «ilusionante», para lo que habrá que hacer una planificación plurianual de los recursos docentes e investigadores, al tiempo que ha señalado «la necesidad rejuvenecer la plantilla» con la incorporación de profesorado joven, dado que se va a registrar «una cantidad ingente de jubilaciones» en próximos ejercicios.

Reducir la burocracia

Tal y como expuso en la entrevista concedida a NAIZ-GARA, Ferreira ha apostado por mejorar la comunicación interna dentro de la universidad y «reducir los trámites burocráticos» que obstaculizan el desarrollo de proyectos estratégicos, para lo que habrá que «buscar un equilibrio entre la transparencia» y los trámites administrativos obligados.

Ferreira ha expresado su sensación de que se dedica «excesivo tiempo a relatar» lo que se hace y a realizar informes de evaluación de lo proyectado. «Muchas veces la excesiva burocracia no nos ha dejado ver los logros de la universidad», ha reiterado.

Según ha concluido, la mejora de la UPV-EHU para afrontar los retos sociales y su necesaria proyección internacional va a requerir de trabajo en equipo de toda la comunidad educativa.