Mikel Insausti
Crítico cinematográfico

Comedia de aventuras ochentera

EEUU. 2022. 112’ Tit. Orig.: ‘The Lost City’. Dtor.: Aaron Nee y Adam Nee. Guion.: Aaron Nee, Adam Nee, Dana Fox y Oren Uziel. Prod.: Sandra Bullock, Liza Chasin y Seth Gordon/ Paramount. Int.: Sandra Bullock, Channing Tatum, Daniel Radcliffe, Brad Pitt, Da’Vine Jay Randolph.

Sandra Bullock y Channing Tatum forman pareja aventurera.
Sandra Bullock y Channing Tatum forman pareja aventurera. (NAIZ)

Una vuelta a las comedias de aventuras que se hacían en los años 80, y más en concreto al modelo de pareja aventurera que entonces representaron con mucho éxito Kathleen Turner y Michael Douglas, bajo la dirección de Robert Zemeckis en ‘Tras el corazón verde’ (1984), y bajo la de Lewis Teague en ‘La joya del Nilo’ (1985).

Y la fórmula sigue funcionando, porque ‘La ciudad perdida’ (2022) lleva ya recaudados cerca de los 70 millones de dólares en la taquilla mundial, gracias a la buena química y sintonía humorística entre Sandra Bullock y Channing Tatum, a quienes hay que sumar la aparición autoparódica de Brad Pitt, que se ríe de sus papeles de guaperas al rescate con la perspectiva del paso de los años.

Sandra Bullock ejerce además de productora, con su habitual buen ojo comercial, y ha confiado la dirección a los hermanos Nee, a pesar de que Aaron y Adam no dejan de ser unos recién llegados. Tras un par de películas pequeñas han subido directamente a las ligas mayores, y ya preparan una adaptación de los juguetes de Matel ‘Masters of the Universe’ (2023).

La Bullock encarna en la dimensión real, porque la película juega con la realidad y la ficción literaria, a una escritora millonaria en ventas, autora de novelas de aventuras románticas. Por su parte Channing Tatum hace del modelo de las portadas de sus libros. Cuando un excéntrico millonario interpretado por Daniel Radcliffe secuestra a la novelista para que le revele importantes secretos de su nuevo libro, el modelo quiere demostrar que puede ser realmente un héroe, y se lanza al rescate de la secuestrada. Hay momentos en escenarios exóticos que parecen sacados de clásicos del género como ‘La reina de África’ (1951), pero el tono general es mucho más ligero y los gags jamás podrían pillar al público desprevenido.