La dirección de la planta Mercedes Gasteiz ha alcanzado un preacuerdo para renovar el convenio con el bloque mayoritario del comité de empresa –UGT, CCOO, Ekintza y PIM– que contempla mejoras salariales desde 2021 hasta 2026, pero que no suscriben ELA, LAB y ESK porque no incluye subidas salariales equivalentes al IPC y consideran que la empresa sigue sin garantizar el poder adquisitivo de la plantilla. En vista de ello, estas centrales han acordado mantener la huelga y la asamblea convocada para este miércoles, en la que decidirán los pasos a dar y si continúan con los paros del jueves y viernes.

Fuentes de LAB han señalado a NAIZ que, para este sindicato y para ELA y ESK se trata de «un mal convenio. Entre otras cosas, porque la subida salarial no está ligada al IPC, tal como demandaba la plantilla. Por tanto, mantenemos la jornada de huelga de mañana para llevar a cabo una asamblea y recabar la opinión de los trabajadores y trabajadoras. E intentaremos que en el referéndum del lunes se imponga el no», han explicado.

Fuentes sindicales citadas por Efe han señalado que el acuerdo incluye una paga de 4.000 euros brutos no acumulable correspondiente a 2021, un incremento salarial del 6% este año y subidas del 2,25% desde 2023 hasta 2026, así como otras mejoras económicas y de la organización del trabajo. Además asegura también otra paga de 1.000 euros anuales, que se cobrará en setiembre y que supone la elimina tanto la aportación a la Fundación San Prudencio como los 150 euros de los fondos sociales.

A ello se añaden otras primas que se cobrarán en función del cumplimiento de objetivos: una paga de resultados de hasta 2.250 euros al año y otra de 500 euros anuales si la producción supera los 200.000 vehículos al año.

En cuanto a las mejoras organizativas se renuncia a una sexta noche de trabajo, se anunciará con más antelación el trabajo en sábado, se jubilarán más de 250 personas a través de contratos relevo, se convertirán 400 contratos temporales en indefinidos (150 de ellos a la firma del convenio), y habrá 150 puestos protegidos según las limitaciones que determinen los Servicios Médicos de la fábrica.

Los sindicatos firmantes del preacuerdo aseguran que esta es «una apuesta decidida de la plantilla por el futuro de la fábrica de Vitoria», de forma que se aseguran las inversiones y el empleo ya que la planta alavesa acogerá la fabricación de los futuros vehículos eléctricos.

Por su parte, la dirección ha asegurado que este «es un muy buen acuerdo para todos los trabajadores de la fábrica» y ha confiado en «retomar la normalidad» cuanto antes, tras las huelgas de las últimas semanas que han obligado a paralizar la producción.

Nueve horas y consulta a la plantilla el lunes 18

Las negociaciones que han finalizado con este pacto se han prolongado durante casi nueve horas y sus términos serán sometidos a referéndum por toda la plantilla el próximo lunes día 18. Durante toda la jornada se han sucedido los cruces de ofertas y contraofertas entre la dirección y el comité que han finalizado pasadas las 18.30 con este preacuerdo. La dirección de la planta gasteiztarra incluso ha tenido que consultar a la dirección central de la multinacional en Alemania los términos de la propuesta que ha puesto sobre la mesa la mayoría del comité, dado que lo que pedían sobrepasaba el presupuesto estipulado para la vigencia del convenio en esta planta.

Según fuentes de CCOO, la propuesta económica que contiene esa oferta mayoritaria «sobrepasa el presupuesto estipulado para la vigencia del convenio» en la factoría de la capital alavesa, que abarca desde 2021 hasta 2026.

El pasado viernes, la dirección de la planta de Gasteiz, empresa que cuenta con más de 5.000 empleados directos y otros 30.000 indirectos, accedió a la petición de retirar la sexta noche de trabajo de la plataforma negociadora del convenio colectivo como pedían los sindicatos.