Mikel Insausti
Crítico cinematográfico

De la culpa a la redención en el camino de la venganza

ENTRE LA VIDA Y LA MUERTE
Bélgica-Estado francés-Estado español. 2022. 100’ Tit. Orig.: ‘Entre la vie et la mort’. Dtor. y guion.: Giordano Gederlini. Prod.: Jérôme Vidal, Jean-Yves Roubin y Cassandre Warnauts. Int.: Antonio De La Torre, Marine Vacth, Olivier Gourmet, Fabrice Adde.

Antonio de la Torre protagoniza este oscuro thriller belga.
Antonio de la Torre protagoniza este oscuro thriller belga. (NAIZ)

Seguramente es el número uno en el Estado español, así que a Antonio De la Torre le ha llegado el momento de dar el salto internacional con una película belga que debutó en el mercado francófono dentro del festival de cine policiaco Reims Polar. Tiene el honor de encabezar un reparto en el que están Olivier Gourmet, Marine Vacth, Fabrice Adde y el rapero Nessbeal. El nombre del director, en cambio, no es aún tan reconocido, debido a que su anterior primer largometraje en la realización, titulado ‘Samouraïs’ (2002), no dejó muy buen recuerdo. Lo de volver a dirigir se lo ha ganado gracias a su labor como guionista, en la que destaca su colaboración con Ladj Ly en ‘Les Misérables’ (2019).

Pero, paradójicamente, el guion no es lo que la crítica ha puntuado en su segundo largometraje ‘Entre la vida y la muerte’ (2022), alegando que abunda en situaciones y giros no del todo convincentes. Por contra, las alabanzas van para la fotografía de Christophe Nuyens y para una producción que consigue recrear la atmósfera oscura de una Bruselas nocturna, peligrosa y violenta.

Es el mundo en el que se mueve el protagonista, como un fantasma en medio de las sombras urbanas. Leo Castañeda es un inmigrante torturado por su pasado, y que en su presente se enfrenta a la más dolorosa de las tragedias con la perdida de su hijo, al que ve morir ante sus propios ojos. En uno de sus turnos como conductor de una línea de metro le toca asistir a un suicidio, el de alguien que se arroja desde el andén a las vías del tren, y al que acaba reconociendo como su propio hijo.

Desde ese impactante episodio vivido su única y principal obsesión será descubrir las razones por las que el joven se ha quitado la vida. Sus pesquisas le llevarán a la participación del fallecido en un atraco que terminó mal, y que supone el origen de toda la violencia con la que se va a encontrar después. El signo de este thriller fatalista sólo cambiará a la altura del desenlace, trazando un camino sangriento que va de la culpa a la redención por el camino de la venganza. Giordano Gederlini se inspiró en su padre chileno.