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Bruselas presenta un plan ante la disputa migratoria entre el Estado francés e Italia

La Comisión Europea ha presentado un plan de acción para la coordinación de la emigración después de que el Estado francés abandonase el mecanismo existente actualmente por la posición de Italia de impedir el acceso a sus puertos de buques de rescate humanitario.

Migrantes observan desde el Ocean Viking la costa de Tolon, en Occitania.
Migrantes observan desde el Ocean Viking la costa de Tolon, en Occitania. (Vincenzo CIRCOSTA | FRANCE PRESSE)

La Comisión Europea (CE) ha presentado este lunes un plan de acción que pretende reforzar el «mecanismo de solidaridad» pactado para ayudar a los países de la Unión Europea (UE) que reciben más «migrantes irregulares», del que el Estado francés se salió la semana pasada por la negativa de Italia a permitir el acceso a puerto del barco Ocean Viking.

El Plan de Acción para el Mediterráneo Central, presentado por la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, contiene veinte acciones destinadas a «abordar los retos inmediatos» en esa ruta, incluido el refuerzo de la cooperación con los países de origen, en particular Túnez, Egipto, Libia y Níger.

La comisaria señaló que 90.000 personas han llegado a través de esa ruta este año y que la situación «no es sostenible» y necesita nuevas acciones.

El plan se presenta con vistas al Consejo extraordinario de ministros de Interior del próximo 25 de noviembre.

Se basa en tres pilares, empezando por la cooperación con terceros países y organizaciones internacionales para prevenir las salidas de migrantes irregulares y para mejorar las readmisiones.

Menciona en particular la necesidad de trabajar más con Túnez, Egipto, Libia y Niger.

También quiere impulsar la creación de vías legales de entrada, a través de las asociaciones ya existentes (en particular con Túnez, Egipto y Bangladesh).

El segundo pilar del plan es «un enfoque más coordinado en el ámbito de las operaciones de búsqueda y salvamento en el mar».

«Obligación de asistencia»

La comisaria recordó que «es una obligación legal para los estados miembros de la UE prestar asistencia a cualquier persona que se encuentre en peligro en el mar hasta el punto de desembarque seguro, con independencia de las circunstancias que lleven a las personas a encontrarse en tal situación».

En ese contexto, subrayó la importancia de promover un diálogo con los estados costeros del Mediterráneo y con la Organización Marítima Internacional.

El plan dice sobre ese último punto que hace falta un «marco específico y directrices para los buques», centradas en particular en las operaciones de búsqueda y salvamento.

Por último, el plan pide reforzar la aplicación del mecanismo europeo de solidaridad voluntaria y el mapa de ruta conjunto trazado.

Aunque a través de ese sistema pactado el pasado junio los estados miembros han planteado más de 8.000 ofertas para reubicar en sus territorios a migrantes, solo se han producido hasta ahora poco más de cien traslados, recordó la comisaria.

Johansson confió además en que el Estado francés recapacite sobre su anuncio de retirarse del mecanismo de solidaridad y siga siendo «tan constructivo (...) como en el pasado».