Con el objetivo de intentar reflotar al PP en Gasteiz, ha retornado a la campaña el que fuera alcalde de la capital de Araba y exministro español de Sanidad, Alfonso Alonso.

Supone el regreso de una figura controvertida, ya que tanto él como el exalcalde Javier Maroto fueron condenados en 2016 por el Tribunal de Cuentas del Estado a pagar 393.862 euros en el conocido como ‘caso San Antonio’, por el perjuicio económico causado al Consistorio de Gasteiz al firmar un contrato público con un empresario a un precio muy superior al de mercado.

Y cuatro años más tarde protagonizó una abrupta dimisión como presidente del PP de la CAV después de que la dirección estatal de su partido en tiempos de Pablo Casado le apartara de las listas para las elecciones al Parlamento de Gasteiz y le sustituyese por Carlos Iturgaiz.

Con los nuevos aires que soplan en Génova, ha regresado a la capital alavesa para arremeter en campaña contra el PNV, señalando que «más oportunidades no se le pueden dar», porque durante los últimos años «ha gobernado mal».

Alonso ha participado este viernes en el primer mitin electoral de campaña de su partido, en el que han intervenido también la candidata a alcaldesa de Gasteiz, Ainhoa Domaica, y el aspirante a diputado general de Araba, Iñaki Oyarzabal.

Ha criticado la gestión del PNV al frente del Gobierno municipal al considerar que en ocho años «lo único que han hecho es un autobús eléctrico, que es un desastre», en referencia al BEI.

Frente al Gobierno «dócil y obediente» ante la dirección del PNV de este partido en Gasteiz, el exalcalde ha reivindicado un PP que «quiere que las decisiones se tomen aquí y sin timos de Sabin Etxea»

Por su parte, Ainhoa Domaica ha señalado que estas elecciones son la antesala de una «oportunidad histórica», porque se ha mostrado convencida de que su partido va a volver a gobernar en la capital. Ha asegurado que en la ciudad «hay ganas de cambio» y ha agregado que cuando sea alcaldesa, va a trabajar para que «ejerza de verdad como capital del País Vasco».

En la misma línea, Iñaki Oyarzabal ha defendido la necesidad de volver a «reunir a una mayoría social» que posibilite «el cambio» frente al «deterioro» provocado por los ocho años de los gobiernos de PNV y PSE-EE.