El Casco Viejo promueve medidas para limitar los pisos turísticos ante la pasividad municipal

La proliferación de pisos turísticos y sus consecuencias han llevado a los y las vecinas del Casco Viejo bilbaino a promover medidas para limitar la expansión de este fenómeno. Frente a la «pasividad» institucional, han presentado una guía que permite restringir estos negocios en las comunidades.

Comparecencia en la que han dado a conocer la iniciativa para frenar la proliferación de pisos turísticos.
Comparecencia en la que han dado a conocer la iniciativa para frenar la proliferación de pisos turísticos. (Marisol Ramirez | FOKU)

La asociación vecinal Bihotzean y la iniciativa SOS Alde Zaharra han presentado este miércoles a la tarde una guía que, en base a la Ley de Propiedad Horizontal, pretende servir de herramienta para tratar de poner freno al «grave problema de turistificación» que sufre el Casco Viejo bilbaino. Consideran que «es importante dar pequeños pasos en la dirección de construir un barrio vivo y con una comunidad articulada, que responda a las necesidades de sus vecinas».

La iniciativa surge a raíz de que hayan constatado la «pasividad de las instituciones públicas» ante un fenómeno que les preocupa y que condiciona sus vidas. «Además de generar molestias y problemas en las comunidades como pueden ser los ruidos, la sensación de inseguridad o pérdida del sentido comunitario, reducen notablemente el número de viviendas disponibles para uso residencial», han expuesto en una comparecencia en las escalera de Mallona.

Los precios de los alquileres se han disparado en las Siete Calles y cada vez son más los y las vecinas que se ven obligadas a irse del barrio.

Servirse de la ley

En ese contexto, proponen adoptar medidas, tal y como permite la Ley de Propiedad Horizontal. En primer lugar, la comunidad debe convocar una junta de propietarios, en la que se incluya expresamente en el orden del día la votación para acordar la prohibición de que el edificio en cuestión acoja pisos turísticos de alquiler.

El acuerdo debe contar con el voto favorable de las tres quintas partes del total de propietarios que, a su vez, representen a la misma proporción de las cuotas de participación. Una vez aprobado, habrá que expedir un certificado del acuerdo para proceder a su inscripción en el Registro de la Propiedad. En el exterior del inmueble, colocarán una placa en la que informan del acuerdo.

Además, si en una comunidad ya existe una vivienda turística, el artículo 17.12 de la Ley establece la posibilidad de que se aumente hasta un 20% los gastos comunes a los propietarios de estos alojamientos turísticos.

Desde Bihotzean y SOS Alde Zaharra han animado a las comunidades de propietarios a que se sumen a la iniciativa para tratar de poner freno a este fenómeno. Han incidido en que frente a la posición pasiva del Consistorio bilbaino, en otros puntos de Europa se van adoptando decisiones para prohibir los alquileres turísticos.