
Athletic y Eibar se han sumado a Real, Alavés y Amorebieta, además de a Osasuna –los rojillos están aún exentos–, y estarán en el sorteo de dieciseisavos de final de Copa que se celebrará el próximo martes. Los rojiblancos han eliminado al Cayón gracias a dos goles de Asier Villalibre y otro más del recién renovado Nico Williams (0-3), y los armeros han tenido que igualar ante el Melilla el 1-0 que habían anotado los locales en el 22, para forzar la prórroga y sentenciar en los penaltis (1-4).
Athletic, dominador de principio a fin
Los vizcainos han dominado de principio a fin el encuentro, que se ha celebrado en los Campos de Sport de El Sardinero, en Santander, y no en el Fernando Astobiza, estadio de los locales, ya que no cuenta con iluminación necesaria para jugar esta competición.
Se ha vivido un buen ambiente en Santander, gracias a la gran afluencia de público vizcaino y pese a la incesante lluvia que ha cubierto el cielo de la capital de Cantabria durante la mayor parte del partido.
Ya en los primeros minutos, los centros laterales de Berenguer, que ha vuelto loca a la defensa del Cayón durante la primera parte, han amenazado con poner la ventaja en el marcador, aunque Galnares, providencial, ha parado a los leones con una doble parada abajo.
Poco a poco, los rojiblancos han ido encerrando a los de Luis Fernández en su propia área, percutiendo por los laterales y dejando situaciones de peligro. Así, en el minuto 22, Asier Villalibre ha aprovechado un rechace del portero local tras un buen centro de Berenguer, para colocar el balón a la derecha del arco del Cayón.
Sin tiempo para encajar el golpe, tan solo tres minutos después el delantero de Gernika ha puesto tierra de por medio en el marcador desde los once metros, en un protestado penalti por manos de Mier.
A la salida de los vestuarios, sin la presión del primer tiempo, el conjunto local se ha intentado soltar en ataque con el equipo más fresco después de los cambios de los cambios, pero su carácter no ha tenido premio.
Al final, en un partido ya sin tensión, el tanto de Nico Williams ha hecho botar a los cientos de bilbaínos que han acudido a Cantabria para disfrutar de la victoria de su equipo.
En el Athletic han jugado los siguientes: Agirrezabala; Prados, Nolaskoain, Yuri, Imanol, Unai (Galarreta, min.63), Muniain (Sancet, min.79), Raúl García (Nico Williams, min.74), Berenguer (Iñaki Williams, min.74), Adu Ares (Jaureguizar, min.63) y Villalibre.
El Eibar se salva en los penaltis
El Eibar se ha clasificado para la siguiente ronda tras dos horas largas de sufrimiento en el Álvarez Claro. El Melilla ha sido mejor pero los noventa reglamentarios han acabado con empate (1-1), en la prórroga no se ha movido el marcador y la eliminatoria ha acabado decidiéndose en la tanda de penaltis, en la que los armeros han estado mucho más finos y ni siquiera han tenido que agotar los cinco lanzamientos (1-5).
Aldai y el debutante Muguruza han entrado en el once del Eibar, en el que solo ha sorprendido la presencia de Mario Soriano, uno de los futbolistas fijos en los onces ligueros de Joseba Etxeberria. Pese a enfrentarse al colista del Grupo II de 1ª RFEF, que solo ha ganado un partido esta temporada y apenas ha sido capaz de marcar ocho goles en quince partidos, el equipo guipuzcoano ha sido incapaz de hacerse con los mandos de un partido en el que el Melilla se ha visto siempre, sin excesos, más cerca de marcar. Lo ha conseguido, de hecho, en el minuto 21, con un remate de José Enrique en el corazón del área. Y no ha estado lejos de ampliar su renta el equipo norteafricano, que poco antes del descanso perdía a Cantarero por lesión.
Ha entrado mejor a la segunda parte el Eibar, al que un agarrón de Cotán a Mario Soriano en el área ha dado la posibilidad de restablecer el empate. Quique ha acertado desde los once metros para establecer el 1-1 en el marcador que ya no ha habido manera de mover. Ni lo han conseguido los armeros, que tras el gol han disfrutado de sus mejores minutos, no demasiado largos, ni lo ha logrado un Melilla que ha vuelto a venirse arriba y que, ya en la prórroga, se ha encontrado con una acción salvadora de Yoel.
Agotados los 120 minutos de juego, el partido se ha ido a los penaltis, en los que no ha habido color. Los locales han fallado los dos primeros (Yoel atajaba el disparo de Caro y Yuste enviaba fuera), con lo que el gol de su pichichi Dani García ha resultado inservible ante el acierto de los azulgranas: Corpas, Quique, Tejero y Troncho han anotado, con lo que ni siquiera ha hecho falta lanzar el quinto penalti.
El Sestao muere en la orilla
La parte negativa de este jueves la ha protagonizado el Sestao River, que ha caído eliminado ante un equipo de Primera División como es el Celta. Los vizcainos han hecho lo más complicado, igualar en el minuto 73, en propia puerta de Unai Núñez, el gol celtiña que habían marcado en del 17.
Sin embargo, en el 78 Douvikas ha hecho doblete para dejar eliminado a un Sestao que ha estado arropado por su gente desde la llegada del equipo en autobús al estadio. En el entorno del club se soñaba con poder pasar de ronda y poder seguir disputándole de tú a tú a otro rival de la máxima categoría, pero no ha podido ser.
Ha sido un choque que ha dejado claro por qué uno y otro equipo tienen los problemas que tienen en sus respectivos campeonatos ligueros y en el que conjunto local ha apretado a un Celta al que le ha salvado un penalti, el que ha dado origen al 0-1, muy discutido por el Sestao y por toda la afición verdinegra.
De inicio, Rafa Benítez se ha dejado en el banquillo a varios de los habituales y el técnico local, Aitor Calle, en unos problemas parecidos al entrenador madrileño, ha repetido los diez jugadores de campo de su último partido ante el Lugo también en Las Llanas.
Ha arrancado el choque sin mucho que destacar más allá de la pelea propia de los primeros minutos y con los dos equipos buscando un dominio que ninguno ha llegado a plasmar antes de la primera jugada de relevancia del encuentro. Que ha sido el gol con el que Tasos Douvikas ha abierto el marcador.
Ha intentado reaccionar el Sestao y no lo ha conseguido hasta pasada la media hora, aunque sin que tampoco lograrse generar mucho peligro. No obstante, un disparo alto desde la frontal de Jon Guruzeta, el hermano del jugador del Athletic Gorka, y otro disparo también arriba de Aranzabe, este tras una gran cabalgada del extremo local, han creado cierta inquietud de un Celta que no era capaz de sacudirse el dominio local antes de llegar al descanso.
Han seguido insistiendo los sestaotarras a vuelta de vestuario, pero ni Jon Cabo, recién incorporado, ha enganchado bien un balón que le ha caído dentro del área ni Mateo ha sido capaz de dar fuerza e intención a un rechace en la frontal que ha acabado en las manos de Marchesín.
Esa primera gran ocasión de la segunda mitad ha parecido volver loco el partido, ya que el Sestao ha empatado a continuación en una jugada desgraciada de Unai Núñez, que ha desviado hacia su propia meta un centro de Aranzabe que buscaba portería y que ha sorprendido a Marchesín.
No habían pasado ni cinco minutos cuando ha llegado el 1-2 en una penalti muy discutido por el Sestao y sus aficionados de Álvaro Mateo a Kevin Vázquez que ha transformado Douvikas engañando desde los once metros a Pere Joan.
Muy enfadado por el penalti, el Sestao ha intentado rehacerse y ha apretado hasta el final, pero no ha sido capaz de no generar ni una ocasión en medio de la gestión del balón del Celta con muchos minutos de los últimos junto a la portería local. Aunque el encuentro ha acabado tras córner forzado por el Sestao.

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