Tras un encuentro con el comité de empresa de la planta de BSH en Ezkirotz celebrado este sábado en el Palacio de Nafarroa, la presidenta Chivite ha señalado que el Gobierno foral mantendrá la «máxima determinación» en la búsqueda de alternativas viables para la fábrica en el marco del grupo de trabajo que se va a crear con el Ministerio de Industria y la multinacional.
El presidente del comité, Juanjo Hermoso de Mendoza, ha afirmado en ese sentido que lo más importante de la reunión del viernes en el Ministerio es que se ha establecido esa mesa de trabajo en la que se analizarán todas las opciones existentes para la planta de frigoríficos y lavavajillas ubicada al sur de Iruñea. 660 empleos directos y otros tantos indirectos están en peligro, después de que la multinacional alemana anunciara el cierre de la fábrica navarra para junio.
«Hemos coincidido con el Gobierno de Navarra en que hay que buscar los objetivos de no perder peso industrial y, por supuesto, tampoco perder puestos de trabajo en BSH», ha afirmado el sindicalista, quien ha destacado que BSH electrodomésticos España ha tenido beneficios de 50 a 60 millones de euros en los últimos años.
Vía de comunicación permanente
Chivite ha garantizado a la representación de la plantilla «la total empatía» en el proceso para intentar continuar la actividad en Ezkirotz. Junto a la creación de un grupo de trabajo a tres bandas para estudiar posibles soluciones que permitan la continuidad de la planta y la preservación del empleo, el Gobierno de Nafarroa ha establecido con el comité de empresa una vía de comunicación permanente a través de la Dirección General de Economía Social y Trabajo.
Según ha agregado Chivite, el Gobierno navarro «no renuncia a ningún escenario factible para la planta Ezkirotz y en todo caso se afanará en explorar todas las oportunidades de reindustrialización», desde la premisa que inspira al grupo de trabajo entre el Gobierno de Nafarroa, el Ministerio de Industria y BSH de colaborar estrechamente para identificar proyectos industriales que puedan aprovechar tanto el talento como las infraestructuras existentes en la planta.
Ante el anuncio por parte del grupo alemán del cese de la actividad en Ezkirotz a partir del próximo mes de junio, tanto la lehendakari como el ministro Hereu ya remitieron en diciembre pasado sendas cartas a Matthias Metz, CEO de BSH, instándole a designar un interlocutor para analizar la posibilidad de revertir la decisión o, en su caso, plantear posibles opciones que permitan salvaguardar las capacidades industriales y el empleo de la planta.
En la reunión de este sábado en Palacio, por parte del Gobierno de Nafarroa han asistido, además de la presidenta, los consejeros Mikel Irujo (Industria, Transición Ecológica y Digital Empresarial) y Carmen Maeztu (Derechos Sociales, Economía Social y Empleo), así como los directores generales Iñaki Mendióroz Casallo (Economía Social y Trabajo) e Iñigo Arruti Torre (Fomento Empresarial).